En todas partes se cuecen habas
Por Carlos Meneses
Lo importante es determinar el grado de responsabilidad que les corresponde a autores de hechos contra la ley.
A pesar de las dificultades que para el Ministerio Público se han creado en el Congreso, respecto a los allanamientos de inmuebles, no han conseguido que con demoras se posterguen las investigaciones que se realizan sobre coimas que han sido denunciadas ante los poderes del Estado.
Eso ha ocurrido con la congresista Elizabeth Medina cuyo hogar fue intervenido por efectivos policiales y fiscales que tuvieron que esperar 2 horas para poder actuar, pues el abogado defensor de la inculpada no aparecía en el lugar.
Lo cierto y definitivo es que quienes allanaron la casa de Medina, tuvieron éxito y lograron que con la nueva modalidad se pudiera iniciar la diligencia que permitirá esclarecer la verdad. Tanto en Lima como en Huánuco se realizaron las averiguaciones de las que participaron conjuntamente fiscales, policías y abogados defensores.
Ahora se trata de esclarecer los alcances de las coimas denunciadas, igual delito será con la modalidad antigua que con la nueva, pues la verdad se abrirá paso y el conocimiento de los hechos y la magnitud que ellos tienen serán finalmente castigados.
Aquí se trata de no dar impunidad y de poder actuar quizá con demora inconveniente, pero suficiente para determinar responsabilidades de quienes hagan mal uso de sus poderes y hasta de las leyes.
En el caso de Elizabeth Medina se debe averiguar cuánto hay de verdad en las presunciones que existen y determinar las responsabilidades que competen a ella y a su esposo en la ejecución de obras públicas en las que, aparentemente y en forma indebida, se habrían beneficiado.