Estudiantes de primaria preservan cultura con libros sobre Uros y Amantaní
PUNO
El Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) en Puno, en colaboración con instituciones públicas y privadas, promovió el acompañamiento de la creación y presentación de estos textos. Esta iniciativa busca valorar el esfuerzo de los estudiantes aimaras y quechuas, quienes han plasmado sus conocimientos y tradiciones en estas obras literarias.
Indecopi, que vela por la competencia leal y la protección de la propiedad intelectual, ha impulsado estas publicaciones para garantizar la preservación del patrimonio cultural de las comunidades Uros y Amantaní. A través de sus relatos, los niños han logrado transmitir su identidad cultural y fortalecer la memoria colectiva de sus pueblos.
Henry Flores Villasante, regidor de la Municipalidad Provincial de Puno, felicitó a los jóvenes autores, resaltando que son los primeros en la región en obtener un certificado de obra literaria emitido por Indecopi, lo que representa un logro importante para la preservación de sus tradiciones.
El libro «Las vivencias y costumbres en Uros Torani Pata», escrito por estudiantes aymaras, ofrece un retrato profundo de la vida cotidiana en Uros. Cada historia refleja las costumbres y experiencias que han dado forma a la identidad cultural de esta comunidad.
Por su parte, «Cuentos ancestrales de la Isla Amantaní», redactado por niños quechuas, transporta a los lectores a un mundo lleno de magia y sabiduría ancestral. Las leyendas plasmadas en el libro han sido transmitidas de generación en generación, con valiosas enseñanzas para la vida en comunidad.
La publicación de ambos libros fue posible gracias al apoyo de Indecopi Puno y la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos (USPTO), que contribuyeron a difundir las obras y a garantizar su registro en la Oficina de Derechos de Autor del Indecopi. Esto subraya la importancia de proteger y compartir la diversidad cultural de los Andes.
Durante la presentación, Herminia Sarmiento, traductora de aymara, destacó la relevancia de preservar las tradiciones y valores ancestrales, e instó a los niños y niñas a seguir creando historias inspiradas en sus raíces.