Buscan reducir la informalidad

laboral en3% para el 2025

Ante la pérdida de competitividad laboral a nivel nacional, la Gerencia Regional de Trabajo y Promoción del Empleo (GRTPE) busca reducir la informalidad laboral en la región en al menos un 3% durante el 2025. Según el último informe regional, más de 450 mil integrantes de la Población Económicamente Activa (PEA) en Arequipa carecen de beneficios laborales, situación que afecta particularmente a los jóvenes que enfrentan barreras para acceder a un empleo formal.

En 2022, Arequipa registró 502,327 trabajadores sin prestaciones laborales y apenas 247,610 con empleos formales, lo que situó la informalidad laboral en un 67%. A finales de 2023, esta cifra disminuyó al 63%, con 459,200 trabajadores informales y 263,164 formales. Durante 2024, la GRTPE reportó la formalización de 15,554 empleos y una reducción de 43,127 puestos informales, aunque el dato final sobre el porcentaje de informalidad del año se dará a conocer en diciembre.

«Al reducir la informalidad laboral, se entiende que las empresas están sincerando la modalidad de contratación de sus trabajadores, otorgando seguros y beneficios de ley. (…) De cara al 2025, esperamos que, tal como venimos trabajando, podamos reducir como mínimo tres puntos porcentuales la informalidad y, por qué no, hasta cuatro puntos. Aunque esto requiere además políticas regionales y más factores», declaró la titular de la GRTPE, Catherine Rodríguez Torreblanca.

Desde la gerencia de Trabajo y Promoción del Empleo estiman que cerca de 500 mil arequipeños de la PEA siguen laborando en la informalidad en 2024. De este grupo, el 34.2% se desempeña en el sector servicios, el 23.8% en comercio, el 21.5% en actividades agropecuarias y pesca, el 10.9% en construcción, el 8.9% en manufactura y el 0.6% en minería. Según Rodríguez Torreblanca, estas cifras suelen variar durante campañas estacionales como Navidad y Año Nuevo.

Con este panorama, la GRTPE busca reforzar estrategias para formalizar empleos, especialmente en sectores vulnerables, y así revertir el alto nivel de informalidad laboral que persiste en Arequipa. Más aún, cuando según el último Índice de Competitividad Regional (Incore) Arequipa perdió competitividad respecto a regiones vecinas debido al lento progreso de la informalidad laboral.