La culminación del Plan de Desarrollo Metropolitano (PDM) deberá garantizar la continuidad de obras y proyectos estratégicos en Arequipa, independientemente de los cambios de autoridades. Desde el Colegio de Arquitectos del Perú subrayaron la necesidad de supervisar y consensuar su elaboración, dado que este instrumento técnico definirá la expansión territorial de la ciudad en los próximos diez años.

«Se necesita que Arequipa, como otras ciudades, tenga un PDM. En ese documento se debe definir cuáles son los proyectos prioritarios. ¿Es importante para Arequipa conservar el patrimonio histórico? Entonces debe nombrarse como proyecto específico, de modo que –venga el alcalde que venga– se tenga la obligación de utilizar las inversiones en dichos proyectos. Esto involucra a la municipalidad provincial, pero también al gobierno regional», declaró Lourdes Giusti Hundskopf, decana del Colegio de Arquitectos del Perú.

Los PDM son instrumentos transversales que comprometen tanto a municipios provinciales como a gobiernos regionales. Según Giusti Hundskopf, un plan bien diseñado permitiría a Arequipa evitar que proyectos prioritarios sean desechados por futuras gestiones municipales. Además, propuso que el cumplimiento del PDM sea obligatorio, tal como sucede en países vecinos, con sanciones administrativas o penales para quienes lo incumplan.

Actualmente, solo el 20% de las municipalidades en el país cuentan con un PDM, lo que genera problemas de ordenamiento territorial en diversas regiones. La decana nacional del Colegio de Arquitectos destacó que ejemplos como el Plan Maestro del Centro Histórico de Lima deben servir de guía para priorizar instrumentos similares en ciudades como Arequipa, Cusco y Trujillo.

El PDM es una herramienta clave para el desarrollo urbano sostenible de Arequipa, cuyo avance requerirá la coordinación entre autoridades locales, regionales y gremios técnicos.