Por: Daniella Paredes J.

Cada año, el Instituto Regional de Enfermedades Neoplásicas del Sur (IREN-Sur) atiende a un aproximado de 4 mil pacientes con cáncer. En la mayoría de los casos, la enfermedad es detectada en fase temprana y puede tratarse con éxito. Enrique del Carpio Rodríguez, gerente del IREN-Sur, resalta que “si queremos tener éxito en el control del cáncer, la idea no es tratar la enfermedad, sino prevenirla”, por lo que exhorta a la población a hacerse chequeos anualmente.

POBLACIÓN DEBE REALIZARSE POR LO MENOS UN CONTROL AL AÑO

El 4 de febrero se celebra el Día Mundial Contra el Cáncer y, a modo de concientización, el Instituto Regional de Enfermedades Neoplásicas del Sur (IREN-Sur) realizó una serie de actividades en sus instalaciones para los pacientes, los doctores y el público en general. El propósito es promover la prevención de la enfermedad, ya que, según Enrique del Carpio Rodríguez, gerente del IREN-Sur, es la forma más efectiva de controlarla.

Las campañas de sensibilización no solo se realizan en esta fecha, sino que son repetitivas para llegar a la mayoría de la población y educarlos al respecto. Por ello, se llevan a cabo en colegios e instituciones públicas. El doctor del Carpio resalta que hay una gran acogida de estas charlas, sobre todo por parte de los pacientes, lo cual los acerca al objetivo de que un mayor número de personas se hagan chequeos preventivos contra el cáncer.

El IREN-Sur cuenta con el centro de radioterapia más importante y moderno de todo el sur. Ha implementado un programa de cuidados paliativos que se enfoca en la terapia del dolor. También está en proceso la conformación de un equipo multifuncional que pueda atender a los pacientes de manera integral, tanto a nivel físico como psicológico, así como en la adquisición de nuevos equipos de cirugía.

Del Carpio señala que hay una característica particular en la región sur por el incremento de casos de cáncer de vesícula biliar. Por el momento se desconocen las causas, pero se están realizando investigaciones para determinar el origen y poder prevenir la enfermedad. En esa línea, precisa también que la mayoría de casos de cáncer son ginecológicos: en las mujeres se da el cáncer de cérvix, mientras que en los hombres es el caso de la próstata.

Albina Mamani, paciente oncológica desde hace ocho años, cuenta su testimonio para invitar a las personas a hacerse chequeos anuales y poder prevenir la enfermedad o atacarla en fase temprana. Ella sufrió de cáncer de mama en el 2014 y su doctor le sugirió hacerse una mastectomía para evitar el riesgo de que la enfermedad se propague. A la fecha, se encuentra estable y asiste todos los años a su chequeo. Albina asegura que mucho depende el estado de humor con el que uno afronte esta situación: “Si usted dice que está mal, está mal. Si usted dice que está bien, está bien. Eso le digo a los pacientes que salen de consulta llorando o tristes”.

El acompañamiento psicológico y emocional también es un factor determinante para la recuperación de los pacientes oncológicos. Si bien es cierto, no todos cuentan con el soporte familiar, hay voluntarios que le llevan alegría a los pacientes y los ayudan a abarcar todas las dolencias que puedan tener, más allá de la enfermedad misma.

Ese es el caso del voluntariado Recuperando Valores – Perú Sonríe, una asociación sin fines de lucro que hace obras sociales desde hace más de 10 años. Carlos Rivera, más conocido por su personaje de clown, Doctor Sonrisas, visita regularmente al IREN-Sur con un grupo de jóvenes para desarrollar un programa llamado “Clown hospitalario”. El objetivo es ayudar a los pacientes en la parte emocional e incluso espiritual: “Si bien el propósito es ayudar a que las personas se sientan mejor, también sensibilizamos y hacemos que los voluntarios sean personas más empáticas”, resaltó.