Por: Alejandro Paz S.

“SERMO HUMILIS”

Es preocupante la lectura que se da a los anuncios de seguridad a implementarse en la ciudad por PERÚMIN 36 Convención Minera a llevarse a cabo del 25 al 29 del presente mes. El General PNP Ghino Malaspina, Jefe de la IX MACREPOL Arequipa, declara que se ha solicitado para dar seguridad a dicho evento y salvaguardar la integridad de los visitantes al mismo, material como escáneres, arcos detectores de metales específicamente para armas de fuego, control de maleteras [de vehículos], canes detectores de drogas, de explosivos, drones, unidad aérea [helicóptero], entre otros, sin considerar personal de 200 efectivos de la DINOES [Lima] y 100 de seguridad de Estado. Pedido que se entiende se ha formulado a su comando en la capital.

Es decir, Arequipa la llamada segunda ciudad del Perú un país en vías desarrollo está al descubierto. Es obvio, que tales requerimientos son con cargo a convenio(s) por servicios especiales o excepcionales que brinda la PNP por el que percibe ingresos, no son gratuitos, pues hay que dar alojamiento, alimentación, traslados de ida y retorno, transporte en la ciudad, seguro, equipo, uniformes y más a los destacados, como pagar costos de combustible y otros, como en su caso a los efectivos de la localidad.

Para qué pagamos impuestos si no contamos con el material solicitado “solo” para el evento minero, del cual estamos de acuerdo que se realice y siga y siga y siga así año tras año, y que se lleven a cabo más eventos con mayor, igual o similar convocatoria. Porque si de dinero se trata, reiteramos, todos los que vivimos en nuestra amada región pagamos impuestos. Por qué esa discriminación, por qué ese desabastecimiento, por qué tanto tiempo le ha llevado al comando de la PNP de la región advertir tales falencias. Ese material que corresponde ser asignado permanente a Arequipa además puede ser utilizado en la macrorregión sur, como prestar asistencia a otras regiones vecinas que en ocasiones lo necesiten y no recurrir a Lima siempre Lima. O es que solamente vienen a cumplir un destaque para luego acomodarse en Lima. Ni imaginarse, entonces, cómo será la seguridad o inseguridad en otras regiones.

Si de descuido y desorden se trata, somos ejemplo, basta recorrer el Cercado de la ciudad y la suciedad en las calles es lo que salta a la vista, en la noche basura amontonada enfrente de negocios de restauración [de comida], ambulantes y mendicidad por doquier, vehículos estacionados en doble fila, motocicletas en veredas, no hay control alguno por la Municipalidad Provincial a la que también se paga tributos por ornato, limpieza pública y serenazgo, sin tomar en cuenta la ausencia de la policía y de Migraciones, en su caso.

Dónde está nuestra autoridad local, esperando aportes generosos para aplicar paliativos y lavar por la semana el rostro de la ciudad, que fuera considerada la más limpia del Perú, cuando los verdaderos arequipeños cuidamos y no ensuciamos nuestra ciudad, dónde está quedando esa cultura. Es triste, más triste que sean los foráneos quienes le develen a nuestras autoridades la inseguridad y el descuido en que tienen secuestrada a Arequipa.