El Gobierno sirio perdió el control de la ciudad de Daraa, en el sur del país, y de la mayor parte de la provincia homónima, cuna del levantamiento de 2011, declaró una oenegé.

«Las facciones locales tomaron el control de más zonas de la provincia de Daraa, incluida la ciudad de Daraa (…) ahora controlan más del 90% de la provincia, mientras las fuerzas del régimen se retiraron», declaró el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

Al menos 19 civiles murieron, entre ellos cinco niños, en ataques lanzados por Siria y su aliada Rusia contra la periferia de la ciudad de Homs, en el centro de Siria, donde se concentran los combates entre los insurgentes y el Ejército Sirio, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Entre los fallecidos hay cinco miembros de una misma familia como «resultado del intenso bombardeo con misiles de las fuerzas del régimen que tenían como objetivo la población de Al Dar al Kabira, en las afueras septentrionales de Homs», capturada ayer por el grupo islamista Organismo de Liberación del Levante, heredera de la exfilial siria de Al Qaeda.

En esa zona murieron otros dos civiles, mientras que 11 fallecieron en Talbiseh, incluidos tres niños, y luego otra persona en Maala según la ONG, cuya sede se encuentra en el Reino Unido, pero que cuenta con una amplia red de colaboradores en el terreno.

El Observatorio señaló que el Ejército sirio y ruso realizaron durante esta jornada una «intensa campaña aérea» contra zonas donde se desarrollaban los combates.

Según el recuento del Observatorio, más de 800 personas, entre ellas más de 100 civiles, han muerto desde el inicio de la ofensiva insurgente contra el gobierno del presidente sirio, Bachar al Asad, el pasado 27 de noviembre.

Los insurgentes se acercan a la ciudad de Homs, después de haber capturado en poco más de una semana las ciudades de Alepo y Hama, ambas capitales provinciales.