Independencia: historia, recuerdos y personajes olvidados
Por: Luis Luján Cárdenas
REFLEXIONES
Estuve de paso en el pujante y bucólico distrito de Independencia (provincia de Pisco, departamento de Ica) trasladando conocimiento a los agricultores y comuneros de las provincias de Huaytará y Castrovirreyna, en el departamento de Huancavelica, acaso el lugar más pobre del Perú.
Allí, después de 25 años, tuve un ameno encuentro con un excompañero de radio, Hugo Chávez Arcos, hoy un afamado escritor y respetado periodista en el sur del país. Ha publicado Independencia: por los caminos de los libertadores (2022), en el que narra la historia del distrito, otrora llamado el valle del Kuntur (Cóndor), poblado antiguamente por los paracas y nascas, y luego por los incas. Tierra del famoso Fermín Tangüis, el creador de una famosa variedad de algodón, cuya alta calidad de fibra (resistente a la temida plaga cotton wilt) se hizo afamada en el mundo, impulsando la exportación y la actividad textil nacional, desde la segunda mitad del siglo XX.
Chávez describe con especial puntualidad y documentación pasajes importantes en la historia del distrito de Independencia, provincia de Pisco, cuna de la Bandera y Puerta de la Libertad. Fue creado el 29 de octubre de 1942, por el gobierno del presidente Manuel Prado Ugarteche. Sus tierras en feudos y haciendas desde la Colonia fueron aradas por indígenas locales, negros africanos y chinos coolies esclavos, que cultivaron algodón, maíz, vid para la producción de pisco y frutales, en gran parte de sus 272 km², cerca del océano Pacífico y donde habitan actualmente no más de 15 000 habitantes.
Leyendo el libro recuerdo a Luis Galdós Tangüis, nieto del famoso agricultor. Lo conocí cuando era próspero agricultor y flamante gobernador de Independencia. Lo visité en su casa del fundo Urrutia, conocí a su señora y sus hijos. Supe que era pintor, con estudios en París y Londres. Su obra estuvo signada por el artista suizo-alemán Paul Klee, fluyendo del surrealismo al expresionismo y lo abstracto. Como presidente de la Asociación Cultural Circulo Blanco, lo invité a exponer en el Club Social de Pisco. Fue un gran momento para él, para todos. Una década después, supe en Lima que murió cuando apenas frisaba los cincuenta años. Un gran artista, un buen amigo, una importante pérdida para Independencia y Pisco.
Volviendo al libro de Chávez: me llamó mucho la atención el pasaje en el que señala dos hechos contradictorios, que ocurren casi al mismo tiempo. En 1942, en plena Segunda Guerra Mundial, mientras el Congreso de la República del Perú creaba políticamente el distrito de independencia (a propuesta del diputado Federico Uranga), el presidente Prado negaba la visa a cien niños judíos huérfanos franceses para ser acogidos por familias judías residentes en el país. Aquellos inocentes meses después morirían en las cámaras de gas de Auschwitz, a manos de los nazis.
Finalmente, dos personajes confluyen en la historia moderna de Independencia: el portorriqueño Fermín Tangüis y el pisqueño Federico Uranga, este último ingeniero agrónomo, denominado el padre de las irrigaciones, por su preocupación por la falta de recursos hídricos en el Perú. Independencia: por los caminos de los libertadores es ya parte de la historia del Perú.