A pesar de las fiestas continúan bajas las ventas en Arequipa
Por: Danna Felipe B
Hay más gente cotizando y menos comprando en los centros comerciales.
PANDEMIA Y DIFÍCIL SITUACIÓN ECONÓMICA SON RESPONSABLES
Números en rojo para los comerciantes. La cantidad de personas que se volcaron a las calles y avenidas de Arequipa por Navidad fue enorme. Sin embargo, pocos terminaron comprando algo en los distintos espacios comerciales. Así, el 2024 se convierte en otro año en el que no se logró alcanzar los niveles de ventas prepandemia.
Rubén Rojas, representante de la plataforma comercial Andrés Avelino Cáceres, señaló que, si bien este año fue mejor que el anterior y agradecen a la población por ello, no pueden tapar el sol con un dedo. La pandemia de la Covid-19 dejó estragos que aún no logran superar. Estima que la brecha para alcanzar los niveles de ventas prepandemia es de siquiera el 25%.
Por su parte, John Moscoso, representante de La Barraca en el centro, evalúa que esa brecha es aún mayor, entre un 40 y 50%. Coincide con Rojas Huayna en que las vías estuvieron llenas el 24 de diciembre, pero pocos realizaron compras. En la década pasada era al revés. Evidentemente, la difícil situación económica a nivel nacional tampoco ayuda y las personas se muestran más recelosas a la hora de gastar mucho dinero.
DESORDEN Y COMPETENCIA DESLEAL
En la plataforma comercial de Andrés Avelino Cáceres, Rubén Rojas detalló el ambiente en el que él y sus colegas trabajan. «Afortunadamente, la delincuencia ha bajado bastante y el comercio ambulatorio fue controlado a medias. Sin embargo, el transporte informal está descontrolado. Las ‘loncheritas’ y minivans generan embotellamientos, convirtiéndose en un dolor de cabeza para quienes llegan en autos particulares o en los buses del SIT».
En el centro de la ciudad, los comerciantes formales particularmente luchan contra quienes sacan puestos enteros a los espacios públicos, según Moscoso García.
«Pusimos conos y cuerdas. Más abajo, nuestros colegas instalaron vallas. ¿Acaso respetaron? Ni las estructuras que colocó la municipalidad el 24 fueron respetadas», lamentó. Ese día, el caos reinó en la calle San Juan de Dios. La gente caminaba por el medio de la pista, convirtiéndose en un dolor de cabeza para aquellas personas que transitaban en vehículo o a pie.