1925: “El gran Gatsby”
Por Willard Díaz
UNO
“El gran Gatsby” para la mayoría de lectores norteamericanos es la novela más importante del país, así lo indican muchas de las encuestas de lectura realizadas allí por revistas, diarios e instituciones educativas. Escrita entre 1922 y 1924 por Francis Scott Fitzgerald, apareció en librerías en abril de 1925. No fue un éxito de ventas, a pesar de la fama de la que ya gozaba el autor vendió menos de 15 000 libros en la primera edición; la crítica fue mejor, no obstante Fitzgerald murió (a los 44 años) creyendo que fue un fracaso. Tras la segunda guerra mundial “El gran Gatsby” ingresó en el plan lector de los colegios norteamericanos y su fama ha ido creciendo desde entonces. En 1998, la influyente Modern Library la ubicó como la mejor novela norteamericana del siglo XX. Se han realizado numerosas versiones teatrales y cinematográficas de la novela y es uno de los libros más traducidos del mundo.
DOS
La historia es contada por Nick Carraway, un clasemediero vecino del millonario Jay Gatsby. Una prima lejana de Nick, de familia rica, Daisy, fue novia de Gatsby años atrás, ahora está casada con un millonario, Tom Buchanan. Gatsby, que era pobre por entonces, pasa años oculto forjándose una fortuna y cuando la logra da grandes fiestas en su nueva y lujosa mansión. Nick es invitado y descubre que Jay sigue enamorado de Daisy y que gasta su dinero desmedidamente solo para tratar de impresionarla. Daysi acepta volver con Jay, pero confrontada con el marido se arrepiente. Gatsby se da cuenta de su fracaso. La novela termina con una de tragedia, Daisy por casualidad atropella y mata a una mujer amante de su esposo Tom, Gatsby es asesinado por error por el marido de la fallecida.
Los críticos han señalado que con “El gran Gatsby” Scott Fitzgerald alcanzó la cima de su habilidad de escritor, a los 28 años. Destacan la ingeniosa estructura literaria que, mediante la elección del Narrador personaje secundario, Nick Carraway, permite que los acontecimientos sean vistos a la doble luz del comentario y la crítica, y de la fortaleza de la historia pasional de Gatsby.
TRES
Diálogo entre el narrador Carraway y Gatsby, acerca de la cualidad de la voz de Daisy:
“—Tiene una voz indiscreta —observé—. Está llena de …
Vacilé.
—Su voz está llena de dinero —dijo él, repentinamente.
Era eso. Yo no lo había llegado a entender antes. Estaba llena de dinero… En ello radicaba el inagotable encanto que se elevaba y decaía, su tintineo, su canto de platillos… En lo alto, en un blanco palacio, la hija del rey, la chica de oro”.
CUATRO
Pero hay dos versiones de la novela. He aquí el comentario de la solapa de la segunda, titulada por su autor “Trimalción” (por el liberto romano del siglo I que gracias a la perseverancia se hace rico y poderoso):
“Se ha dicho muchas veces que “El gran Gatsby” es una novela perfecta, lástima que no cuente un poco más de Gatsby. Pero en el original que Fitzgerald presentó a la editorial había más de Gatsby. También tenía otro título: “Trimalción” (Fitzgerald quería que su novela fuera el equivalente norteamericano del “Ulises” de Joyce). La leyenda dice que “El gran Gatsby” se convirtió en una novela perfecta luego de pasar por las manos santas de Maxwell Perkins, su editor. Pero en “Trimalción” se puede ver a Gatsby tal como lo veía Fitzgerald: más crudo, más épico, más noble, más estúpido. Solo por eso vale la pena sumergirse de cabeza en este libro”.
CINCO
Fitzgerald es un tipo que nadie tiene derecho de opacar. Nadie lo puede hacer mejor que él. Creo que se perdió ser el más grande escritor, y la razón es bastante obvia. Si el chico pobre ya era un alcohólico en sus días de colegial, es una maravilla que lo hiciera tan bien como él lo hizo. Tenía una de las cualidades más raras de toda la literatura. La palabra es “encanto” –el encanto que Keats podría haber tenido. Un tipo de magia sutil, controlada y exquisita.
(Raymond Chandler)