Medicina Humana de la UCSM recibe certificación internacional del COMAEM

Gracias a la certificación los egresados santamarianos ejercerán su profesión en 100 países del mundo.
Diario El Pueblo
Con gran orgullo, la Facultad de Medicina Humana de la Universidad Católica de Santa María, recibió oficialmente la placa de Acreditación Internacional otorgada por el Consejo Mexicano para la Acreditación de la Educación Médica (COMAEM). Este reconocimiento, obtenido tras un riguroso proceso de evaluación, posiciona a la unidad académica como una de las instituciones líderes en la formación médica a nivel internacional.
La Facultad de Medicina, se convirtió en la primera en el sur del Perú en recibir la certificación del Consejo Mexicano para la Acreditación de la Educación Médica (COMAEM), importante entidad internacional que tiene como función principal la de evaluar y acreditar los programas de formación médica, con el objetivo de impulsar la calidad en la enseñanza.
La acreditación otorgada es un reconocimiento al compromiso de la UCSM en ofrecer una educación integral de alta calidad, formando médicos competentes y éticos con vocación de servicio y compromiso social.
El Dr. Alejandro Miranda Pinto, Decano de la Facultad de Medicina Humana, explicó que el proceso se realizó por más de dos años, en este tiempo se logró absolver 242 indicadores, al culminar este proceso se alcanzó la certificación, la cual tiene una vigencia de cinco años y posiciona a la Escuela Profesional de Medicina Humana de la UCSM, como el primer programa de una universidad pública y privada del sur del Perú en alcanzar dicho logro.
Por su parte el Dr. Miguel Fernando Farfán Delgado, Vicerrector Administrativo de la casa santamariana y Presidente de la Comisión de Acreditación Internacional de la Facultad de Medicina Humana, explicó que este reconocimiento permite a nuestros egresados ejercer su carrera profesional, así como cursar estudios de postgrado en 100 países del mundo entre ellos los Estados Unidos, donde podrán postular y realizar su residencia, debido a que el COMAEM, es una agencia reconocida por la Federación Mundial de Educación Médica (WFME).
Los santamarianos gracias a esta certificación, accederán a programas de especialización en Canadá y en los países de Europa, lo que les otorga una ventaja estratégica en el mercado laboral global. Además, los docentes marianistas tendrán la oportunidad de participar en cursos de perfeccionamiento y pasantías, lo que contribuirá a la mejora continua de la formación médica de pregrado.
Para el Rector de la UCSM, Jorge Luis Cáceres Arce, la certificación alcanzada por la Facultad de Medicina Humana, es el resultado del esfuerzo conjunto del equipo de acreditación.
“Mi reconocimiento y felicitación a los docentes, estudiantes y trabajadores que participaron de manera activa en este proceso de certificación, seguiremos invirtiendo en la especialización y apostando por la calidad educativa”, expresó Cáceres Arce.
Por su parte el presidente del Consejo Mexicano para Acreditación de la Educación Médica (COMAEM), Jesús Hernández Tinoco, refirió que la Facultad de Medicina Humana, hace dos años empezó la fase preparativa para establecer una autoevaluación institucional; luego de este proceso el organismo que dirige realizó la visita de evaluación externa y emitió su dictamen que contenía recomendaciones que fueron a aplicadas y con ello lograron la certificación internacional.
En el marco de la certificación internacional, se presentó el libro Acreditación Internacional Facultad de Medicina Humana “Reflexiones sobre la Experiencia Relevante”, el texto de 123 páginas, explica como la unidad académica se constituye como una institución comprometida con la formación de médicos competentes, íntegros y responsables, capaces de generar y aplicar conocimiento científico al servicio de la sociedad.
Este compromiso se refleja en la calidad educativa que ofrece la UCSM, en los valores que promueve y en los recursos que pone a disposición de los estudiantes, docentes y de la propia institución, con el fin de alcanzar la excelencia en todos los aspectos de la educación médica, la cual debe ser un proceso integral que no solo forme profesionales, sino también ciudadanos éticos y comprometidos con el bienestar común.