Libros: “El enigma de la literatura”

Por: Melissa Mariel Medina Palza
El enigma de la literatura (“Dedo crítico editores, 2025) es una de las obras más recientes del destacado académico y crítico literario peruano Miguel Ángel Huamán Villavicencio. Actual catedrático de la Escuela de Literatura en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, quien ha dedicado su trayectoria a explorar los vínculos entre la teoría literaria, la crítica cultural y la formación académica. Su producción intelectual incluye títulos como Cómo leer poesía: Vallejo dice hoy, Diálogo de sordos en la crítica peruana y Una poética del mañana: teoría literaria del siglo XXI, donde ofrece una reflexión aguda sobre literatura en nuestros tiempos.
Fiel a esta línea discursiva El enigma de la literatura es un libro que exige consciencia y valentía, que releva los ánimos del artista desencantado. Huamán, crítico y parcial, aboga por la urgencia del despertar, de levantar la vista del pesimismo que ha traído la posibilidad de ser reemplazados ante la Inteligencia Artificial (IA) y su aparente capacidad artística y literaria. El tono es casi beligerante, ligeramente irónico, directo, comprometido; el lenguaje es sencillo, pulcro y recursivo, al servicio de la capacidad creativa y la ineludible modernidad estilística.
El autor examina cómo la creación literaria contemporánea se enfrenta a un fenómeno de resignación, dependencia y subordinación ante la IA, de saturación informática y una cultura que se decanta por el uso de recursos intelectuales tecnológicos. Se nos presenta un análisis metateórico —entendido como la reflexión sobre la ficción y su construcción— que revela las tensiones entre la imaginación humana y expone las limitaciones de la IA. De este modo, el título cobra sentido conformando punto por punto lo que sería el enigma de la literatura.
De los once apartados presentados se destacan como argumentos generales: la no-creatividad, la sosa escritura contemporánea, la degradación del espíritu del lector crítico y el reciclaje deshumanizado de letras apersonales. Huamán nos advierte —con ejemplos contundentes— la masificación de la literatura automatizada, una creación repetitiva sin sentimientos ni novedad —o peor— sin la mínima creatividad.
Resulta curioso mencionar de entre las múltiples comparaciones que hace con la comida, el mercado capitalista o creación de un poema conformado por retazos, pero humanos, caer en cuenta en que todos y cada uno de los argumentos compelen hacia un solo discurso reiterado. Se aborda, objeta y defiende desde todos los ángulos la singularidad irremplazable de la obra humana en la creación artística.
Del mismo modo, se tiene involucrado al lector como foco principal de crítica, será él quien decida la oferta y el esfuerzo al apreciar una obra que reboza de significado por una narrativa superflua y extensa de sencillez parvularia. Leer, para Huamán, no es asimilar significados dados, sino activar procesos de pensamiento, de emoción, de sentido.
El enigma se construye como una meditación sobre la amenaza que representan tanto la cultura del impresionismo, del esfuerzo vago y la pereza intelectual ante la tecnología —el uso acrítico de la inteligencia artificial— tanto apreciación literaria como para el propio escritor. Es menester aclarar que el texto —aunque parcial— no carece de lucidez, es combativo, sí, critica, sí, reprocha y reniega, pero jamás peca de irracional. En este sentido, El enigma de la literatura es un manifiesto a favor de la literatura actual, una voz que se resiste a la automatización y la homogeneización del pensamiento y el declive del pensamiento creativo.
(Escuela de Literatura, UNSA)