Por Carlos Meneses

Hoy es un día decisivo para la formalización minera que depende en gran medida de la actitud de los grupos de bancada mayoritarias.

El Poder Ejecutivo reiteró ayer que policías y soldados hoy devolverán normalidad a las carreteras que han sido sucesivamente bloqueadas durante la inestabilidad del proyecto de reforma minera peruana.

Ayer volvieron a ocurrir incidentes en los alrededores del Palacio Legislativo y la Policía cargó con bombas lacrimógenas la pretensión de volver a ocupar espacios libres en la Av. Abancay.

En otros lugares de la República se mantienen dificultades para el abastecimiento de gas licuado de petróleo y otros combustibles y solo en algunos lugares se ha permitido el paso vehicular mediante treguas de dos o más horas. El Gobierno ha reiterado que hoy estará normalizada la situación en las carreteas y reabierta la libre circulación de pasajeros e invitó a las empresas de transportes a vender pasajes con algunas condiciones.

La presidenta Dina Boluarte y el ministro del Interior señalaron que en acción conjunta las Fuerzas Armadas y la Policía despejarán las vías que previamente serán controladas por la Policía; se confirmó ayer que había pérdidas en agroexportaciones en todo el país particularmente en el sur donde paltas están amenazadas con dañarse por el mantenimiento del bloqueo de vías.

La mandataria hizo una nueva invitación a que se formalicen las acciones de los mineros y que el Congreso de la República ratifique que el plazo de vencimiento para la formalización será definitivamente el 31 de diciembre de este año. Eso es lo que no aceptan 50 mil mineros informales quienes pretenden una ampliación hasta el año 2026.