HOSPITAL GOYENECHE. Nuevas arbitrariedades del GRA en un proyecto de salud
Directora del Goyeneche cuestiona desiciones en torno al nuevo nosocomio y la sacan del cargo.
Por Danna Felipe B.
Opinar para la buena construcción del nuevo hospital Goyeneche le costó el cargo a Paula Suclla. La designación de la doctora como directora del nosocomio llegó a su fin el último viernes. Al día siguiente, el gerente regional de Salud, Walther Oporto, asumió la dirección del centenario sanatorio. Es decir, actualmente desempeña dos roles. Dentro del establecimiento médico se conjetura que el objetivo es que el funcionario de confianza de Rohel Sánchez acepte construir el nuevo sanatorio sea como sea, sin pensar en la demanda de salud futura.
Se averiguó que todo esto se remonta al jueves 24 de julio. Durante la exposición del consorcio francés EGIS AP-HPi a los representantes del hospital, estos últimos se dieron con la mala sorpresa de que el nuevo nosocomio tiene sus bases en 2013. Obviamente, la población ha crecido y, sobre todo, la COVID-19 “desnudó” por completo nuestro ineficiente sistema de salud.
Entonces, partiendo por ahí, no es un atractivo horizonte.
Ahora bien, se habló de la capacidad de camas. El sanatorio tiene menos de 300 hoy en día. La propuesta es de 330. Bien. Sin embargo, médicos del Goyeneche alertaron que no se ha contemplado el número normativo de camas UCI para un hospital III-1: entre el 5 % y 8 % del total de camas, según el Ministerio de Salud. Este número contempla UCI para adultos, niños y recién nacidos. Lamentablemente, en la diapositiva expuesta no solo no se cumple la norma, sino que tampoco se observa por ningún lado el número de camas UCI pediátrica (niños); solo se observa: “Camas: 8 y Cunas: 7. En total: 15”.
El problema no es que haya más camas en otros servicios, sino que no haya correspondencia con la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Esto y otros aspectos del proyecto causaron la disconformidad de la entonces directora Paula Suclla, quien fue enfática y afirmó que no firmaría nada. Propuso lo lógico: ya que aún no se ha puesto la primera piedra, el proyecto puede alterarse en beneficio de Arequipa y el sur del Perú.
Parece que eso no fue de agrado y, al día siguiente, viernes 25 de julio, a la directora y su comité se les impidió el ingreso a una nueva reunión. En sus lugares estuvo un grupo de personas designadas por el gerente regional de Salud. Lo que sorprendió de mala manera a todos es que la subdirectora Mayza Torres Silloca figuraba dentro de la nueva relación, pero como directora. “La directora actual soy yo. No entiendo”, declaró ese mismo día Suclla Loayza desde el Ejecutivo Regional. Además, públicamente dio a conocer su descontento con ciertas acciones del doctor Oporto.
En el Cercado, durante las actividades oficiales por Fiestas Patrias, el gerente de Salud explicó que la directora se quedó afuera por un tema “técnico”. “Quien tiene la información técnica es la subdirección. Además, que la directora tiene ocupaciones mucho más relevantes”. También, en ese contexto, se le hizo hincapié en que pareciera que se está buscando retirar del cargo a Paula Suclla. Respondió: “No. Para nosotros hay cosas más importantes. En este momento eso está en evaluación, como en todos los funcionarios”.
No obstante, el sábado 26 de julio, un día posterior a ese, desde la Gerencia General del Ejecutivo Regional se dio por concluida la designación de Suclla Loayza como directora del Goyeneche. En su lugar, nombraron desde el domingo 27 de julio al gerente regional de Salud, tal como en un momento pasó con el IREN Sur, ocupa doble rol nuevamente.
Dentro del hospital se conjetura que se busca muchas cosas. Entre esas muchas cosas, la más clara para los médicos es que el Gobierno Regional pretende que el nuevo nosocomio se construya sin tomar en cuenta la demanda de salud futura.
