En algunas zonas se registraron cambios en el nivel de la marea, pero sin afectaciones. El litoral peruano fue declarado en alerta ante posibles tsunamis tras el sismo de magnitud 8.8 registrado el miércoles 30 de julio en Rusia.

SIN ANOMALÍAS EN LA COSTA

En Arequipa, la alerta incluyó a las provincias costeras de Islay, Camaná y Caravelí, lo que obligó al cierre de diez puertos, paralizó el trabajo de más de un centenar de embarcaciones pesqueras y provocó la suspensión de clases en algunas instituciones educativas. Aunque el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) alertó sobre la posible llegada de oleajes anómalos, no se registraron incidentes y la alerta fue levantada por la tarde.

El sismo ocurrido en el océano Pacífico Norte activó una alerta internacional emitida por el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico. Horas después, la Dirección de Hidrografía y Navegación (DHN) de la Marina de Guerra del Perú replicó la advertencia para el litoral peruano y recomendó medidas preventivas. Según las proyecciones del COEN, se esperaba la llegada de olas de hasta 0.95 metros a los puertos de Atico y Matarani, lo que activó los protocolos de emergencia.

En respuesta, el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) Arequipa informó que los distritos costeros de Caravelí, Camaná e Islay iniciaron el monitoreo de sus playas. Las plataformas de Defensa Civil de cada distrito coordinaron acciones con la Policía Nacional, Serenazgo y demás autoridades competentes.

A raíz de la alerta, se cerraron 22 puertos en el litoral sur, 10 de ellos en Arequipa: caletas Atico, La Planchada, Quilca, El Faro; puerto Matarani (muelle Ocean Fish); terminal portuario Tisur (muelles 1A, 18, “C” y “F”); y el terminal multiboyas Monte Azul y Mollendo. Todos ubicados en la provincia de Islay. Pese al monitoreo permanente, no se registraron anomalías en la zona costera.

Más de 100 embarcaciones pesqueras quedaron inmovilizadas en Matarani. Según Mildwar Rodríguez Vásquez, presidente de la Asociación de Armadores y Pescadores Artesanales, los pescadores de erizo y mariscos decidieron dejar sus naves ancladas en el puerto para evitar daños. En Mollendo, algunos comerciantes contrataron maquinaria pesada para reforzar sus negocios con movimientos de arena. En Caravelí, se reportó un leve cambio en el nivel de la marea, sin mayor riesgo.

En Camaná, la municipalidad provincial solicitó a la empresa SEAL cortar el suministro eléctrico durante dos horas como medida preventiva en los distritos Quilca y Samuel Pastor. Además, la plataforma de Defensa Civil acordó suspender clases temporalmente. En el distrito de Mariscal Cáceres se reportó una ligera alteración del mar en la mañana que se estabilizó en la tarde. En Samuel Pastor, el mar se retiró unos diez metros sin afectar viviendas ni pobladores. El resto de distritos no reportó cambios significativos.

Por la tarde, el COEN levantó la alerta de tsunami tras confirmar que el oleaje no provocó afectaciones en territorio peruano. El COER Arequipa informó que la mayoría de distritos costeros mantuvieron condiciones normales. Las medidas de prevención se aplicaron en zonas específicas como Punta de Bombón, y el monitoreo continúa con participación de autoridades locales, personal de Serenazgo y equipos técnicos de gestión de riesgo.