Por: Daniela Fernández Cruz

Gestión municipal gestiona el cierre de infraestructura en Camaná.

DESTINO IDEAL PARA LOS AMANTES DE LA PLAYA

“La Perla del Sur” se ha ganado un lugar especial en el corazón de quienes la visitan por su combinación perfecta de sol, mar, tradición y sabor. Camaná, situada en la costa arequipeña, ofrece un clima cálido casi todo el año, lo que la convierte en un destino ideal para los amantes de la playa y la buena comida. Sus extensas arenas y su ambiente acogedor hacen que cada verano reciba a miles de turistas que buscan descansar frente al Pacífico.

Entre sus playas más famosas destacan La Punta, El Chorro y Las Cuevas, cada una con su propio encanto. Mientras La Punta es ideal para paseos tranquilos y degustar delicias marinas frescas, El Chorro y Las Cuevas atraen a quienes buscan olas para deportes acuáticos o simplemente contemplar atardeceres de postal. Pero Camaná no es solo mar, cuenta con una variada oferta de recursos como Playa La Miel, Caleta de Quilca, Humedal El Chiflón, el Valle del Río Camaná, el Mirador del Inca y la Caleta San José, entre otros. “Queremos que Camaná no sea solo un destino de sol y playa, sino un lugar atractivo durante los 365 días del año, porque tenemos una oferta variada para visitar todo el año”, menciona Bruno Pablo Negrini, subgerente de Turismo de la Municipalidad Provincial de Camaná.

La gastronomía es otro de los grandes atractivos de la provincia. Sus rutas culinarias incluyen el Valle de Quilca, con gastronomía marina; el Valle de Ocoña, donde el camarón es la estrella; y el Valle de Camaná, con platos típicos como arroz con mariscos, rellenas, empanadas y dulces artesanales. También destacan la Ruta del Pisco Norte y la Ruta del Olivo. “Más de un tercio del gasto turístico se destina a gastronomía, por eso la promovemos como un producto turístico clave que combina identidad y sabor”, destacó Negrini.

El desarrollo turístico de Camaná avanza con proyectos priorizados en el Plan Estratégico Regional de Turismo, como el mejoramiento de Playa La Miel, la Caleta de Quilca, el Pueblo de Camaná, el Valle del Río Camaná, la Laguna Tilimaco, el Mirador Qhapaq-Ñan y el Valle de Pescadores. “Estamos cerrando brechas de infraestructura para que la experiencia del visitante sea cada vez mejor. Además, trabajamos en la formalización y capacitación de prestadores de servicios turísticos, para que puedan ofrecer calidad y seguridad”, sostuvo el funcionario.

Visitar Camaná es descubrir un destino donde el descanso, la aventura y la cultura se encuentran en armonía. Sus playas, valles y sabores construyen una experiencia completa que invita a volver una y otra vez. “Nuestro objetivo es que Camaná sea un destino turístico de alcance regional, activo todo el año y no solo en temporada de verano”, concluyó Negrini.