Por Germán Yuca Ch.

Advierten que muchos conductores no respetan los límites de velocidad. El Sinadef reporta 114 fallecidos, mientras la UPIAT confirma que más del 60 % de accidentes fatales ocurren en la vía Arequipa–Puno. Expertos advierten que la imprudencia de los conductores sigue siendo la principal causa.

EN EL PAÍS MUEREN 3 MIL PERSONAS AL AÑO

Arequipa atraviesa un alarmante repunte en la siniestralidad vial. Según la Unidad de Prevención e Investigación de Accidentes de Tránsito (UPIAT), en lo que va del 2025 se registraron 106 fallecidos en 85 accidentes de tránsito. El Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef) eleva la cifra a 114 muertes, lo que refleja un subregistro en los reportes policiales.

El jefe de la UPIAT Arequipa, Víctor Vargas Zegarra, señaló que la mayoría de los accidentes responden a un factor común: la imprudencia. “Son cifras alarmantes que preocupan a toda la región. Muchos conductores no respetan los límites de velocidad, se distraen al volante o no verifican las condiciones de sus vehículos. Esto, sumado a factores climatológicos, agrava el riesgo en carretera”, declaró.

TENDENCIA EN ASCENSO

Las cifras evidencian un incremento sostenido. En 2023 se registraron 100 muertes por accidentes de tránsito en Arequipa, mientras que en 2024 la cifra se elevó a 181. El panorama del 2025 es aún más preocupante: en apenas siete meses ya se superó la barrera de los 100 fallecidos, lo que anticipa un cierre de año más trágico que los anteriores.

A nivel nacional, la situación no es menos crítica. El Sinadef reportó que entre enero y febrero de este año 357 peruanos murieron en accidentes viales, lo que equivale a siete fallecidos por día. En total, 271 muertes fueron atribuidas a siniestros de tránsito solo en los primeros meses del 2025.

CARRETERAS DE MAYOR RIESGO

La carretera Arequipa–Puno concentra más del 60 % de los accidentes fatales. Le siguen la Panamericana Sur, la ruta hacia Cusco, el ingreso a Yauca, y vías urbanas de alto tránsito como la variante de Uchumayo, la vía de Evitamiento y distritos como Cerro Colorado, Yura y Paucarpata.

Un informe de la Policía revela que, en casi el 90 % de los casos, el accidente tuvo como causa principal un error humano: exceso de velocidad, desatención, imprudencia en los adelantamientos o consumo de alcohol.

CAUSAS Y CONSECUENCIAS

El análisis nacional muestra que las principales causas de mortalidad vial son: imprudencia del conductor (50 %), conducción en estado de ebriedad (7 %), imprudencia del peatón (5%), exceso de velocidad (4 %) y otras negligencias (3 %).

En Arequipa, las consecuencias no solo se miden en vidas humanas. Los hospitales de referencia, como el Honorio Delgado, reportan un incremento de pacientes traumatizados por choques y atropellos, lo que genera saturación en salas de emergencia y una presión adicional al sistema de salud.

PREVENCIÓN

Ante este panorama, Vargas Zegarra reiteró la necesidad de reforzar la educación vial y las campañas preventivas. “Revisar frenos, niveles de aceite y agua, y respetar las normas de tránsito puede salvar vidas. No hacerlo implica exponer no solo al conductor, sino también a sus pasajeros y peatones”, advirtió.

La Policía Nacional anunció que incrementará los operativos de control de velocidad y alcoholímetro en tramos críticos, además de coordinar con las municipalidades acciones de fiscalización para el transporte urbano e interprovincial.

En un país donde casi tres mil personas mueren cada año por accidentes de tránsito, Arequipa se convierte en uno de los puntos rojos de la siniestralidad vial. De mantenerse la tendencia actual, el 2025 podría cerrar con una de las cifras más letales de la última década.