Por: Carlos Meneses

Así que habrá que vigilar los pasos de Santivañez para que no se vuelva a equivocar y provoque otro laberinto en la política peruana.

Para la mayoría de peruanos fue una sorpresa poco agradable el regreso al gabinete de quien fuera, hasta hace menos de un año, titular del Ministerio del Interior. Claro que hubo ciudadanos, como el alcalde de Lima Rafael López Aliaga, que han dado favorable pronunciamiento al regreso de Santiváñez al gabinete, esta vez como ministro de Justicia.

El edil limeño ha dicho que cuando Santiváñez fue titular del Interior lo ayudó en algunas gestiones por lo cual ha manifestado que respalda el nombramiento que la presidenta Dina Boluarte ha hecho en favor de quien tuvo un cargo de alta representación en el gobierno.

Lo cierto y negativo de todo esto es que hace un año en el Congreso de la República se puso en la agenda un proyecto de ley que ordenaba que todo ministro censurado no podía volver al gabinete del gobierno que lo había despedido, pero el tema ha sido postergado hasta el presente. Así que no habiendo limitaciones la mandataria podía hacer lo que ha hecho.

A diferencia del parecer del alcalde de Lima, la mayoría de los congresistas están disgustados por lo ocurrid, pues se trata de una persona polémica hasta el extremo de haber sido censurada. Lo más prudente era dejarlo en otro cargo y no darle justamente el Ministerio de Justicia en un momento delicado, porque se sigue tratando la inseguridad como el peor problema que hay en el Perú.

No podemos estar viviendo en un país cuya realidad se está evidenciando en el resto  del mundo por no hacer lo oportuno para detener la ola de violencia incluso en los Estados Unidos el presidente Donald Trump ha movilizado fuerzas federales para que en ese país no pase lo que sucede en Lima y en otras ciudades como Bogotá.