Bastante breve fue la conferencia de prensa que dio Juan Reynoso luego del empate 2-2 ante ADT de Tarma como visitante. No estalló por el mal arbitraje y errores de sus jugadores. Prefirió poner pausa y evaluar por qué se perdieron dos puntos que estaban en el bolsillo.

Menos de cuatro minutos duró la conferencia de prensa que dio el entrenador Juan Reynoso. Solo dos preguntas le hicieron los hombres de prensa que estuvieron en el la sala de periodistas en el estadio Unión Tarma.

Había gritado a sus jugadores durante noventa minutos. Soltó su bronca por el polémico arbitraje de Cristian Santos. Empujó a su equipo hacia adelante. No le alcanzó.

En el último segundo del partido y con un penal le empataron 2-2 al FBC Melgar que había logrado remontar el marcador de 1-0 en contra.

Sin embargo, para sorpresa de muchos, a Juan Reynoso se le vio alejando a sus jugadores del árbitro. Se le fueron encima. El técnico puso calma. No quiso empezar el partido ante Universitario de Deportes, el domingo 14 de setiembre, perdiéndolo fuera de la cancha.

¿Qué opina sobre el árbitro y el partido?, le preguntaron. Con la voz ronca. Aparentemente tranquilo. Mirando para un lado y para otro, moviendo las manos, Juan Reynoso respondió:  “Poco para opinar. Creo que a esta altura de mi vida o mi carrera ponerme a señalar o discutir no corresponde. La gente que debería encargarse de este tipo de situaciones, ojalá lo pueda hacer y que nos hagan mejorar. Nada más».

Analizaremos el video más tranquilos, con otra adrenalina y llegaremos a conclusiones que nos permitan seguir mejorando”. Luego hubo segundos de silencio. Dijo gracias, se levantó de la silla y se fue.

La pregunta que quedó al aire fue si los malos arbitrajes deben ser juzgados y sancionados por los que gobiernan la Comisión Nacional de Árbitros a cargo de Víctor Carrillo o los directivos del club con el administrador Ricardo Bettocchi a la cabeza.

Lo cierto es que el entrenador puso paños fríos al momento de un mal resultado. El que se logró más por errores propios que por virtudes del rival o errores del árbitro.

El FBC Melgar tendrá más de dos semanas para trabajar lo que será la recta final del campeonato. Por lo pronto está en zona de clasificación a Copa Sudamericana, pero el reto de Reynoso es poner al equipo en la Copa Libertadores del 2026.