Foto: Jorge Esquivel

Productos de primera necesidad sin variaciones. A más de 48 horas de la asunción del nuevo presidente de la República, José Jerí Oré, tras la vacancia de Dina Boluarte, la ciudad de Arequipa vive una aparente calma en cuanto a su dinámica económica cotidiana. Las actividades comerciales continúan desarrollándose con normalidad en los principales centros de abasto de la ciudad.

PRODUCTOS LLEGAN CON NORMALIDAD

En una visita a los mercados más representativos de la plataforma Andrés Avelino Cáceres, ubicado en el distrito de José Luis Bustamante y Rivero, así como los de Río Seco, en Cerro Colorado, se pudo constatar que la venta de alimentos de primera necesidad se realiza sin contratiempos y sin variaciones notorias en los precios.

Los productos cárnicos mantienen sus costos regulares. La carne de res se ofrece a 16.50 soles por kilo, mientras que el pollo se vende a 8.50 soles. Por su parte, el cerdo alcanza los 17.00 soles el kilo y el cordero, 18.00 soles. Estos precios coinciden con los registrados la semana pasada, según los propios comerciantes.

En cuanto a las verduras y hortalizas, los precios también se mantienen estables. La papa cuesta 1.20 soles por kilo, la zanahoria 2.00 soles, la vainita 5.00 soles, las alverjas 4.00 soles y la betarraga 1.50 soles. Asimismo, el pepinillo alcanza los 3.00 soles por kilo, el limón 6.00 soles, la cebolla 1.00 sol y el tomate 5.00 soles.

Los vendedores señalaron que, pese al clima de incertidumbre generado por la reciente transición política en el Gobierno central, no se han registrado alzas significativas ni problemas de abastecimiento en los mercados locales. «La situación está tranquila y los productos están llegando con normalidad», comentó una comerciante del mercado de Río Seco.

Por su parte, los administradores de estos centros de abasto confirmaron que se mantienen coordinaciones con la municipalidad para asegurar el buen funcionamiento de los mercados, así como la higiene de los espacios de venta. Aseguraron que, hasta el momento, no se han reportado incidentes ni alteraciones en el flujo comercial.

Además, se ha reforzado el control del pesaje de los productos. En distintos puntos de los mercados se han instalado balanzas de control donde los compradores pueden verificar el peso exacto de sus compras. Esta medida busca garantizar la transparencia en las transacciones y prevenir abusos.

La vigilancia sanitaria también se ha intensificado. Se realizan inspecciones periódicas para verificar la limpieza de los puestos y la correcta manipulación de los alimentos, en un esfuerzo por preservar la salud de los consumidores y mantener la confianza del público en estos espacios.

En conclusión, a pesar del reciente cambio de mando en el Ejecutivo y la expectativa por las decisiones del nuevo gobierno, la economía popular en Arequipa muestra signos de estabilidad. Los comerciantes continúan con sus actividades con normalidad, en un contexto donde la calma social y la supervisión municipal son clave para sostener el orden.