Desde agosto la obra vial esta abandonada.

Desde la Gerencia Regional de Infraestructura (GRI) informaron que la empresa a cargo del proyecto, el Consorcio Vial Arequipa, no cuenta con las garantías financieras necesarias, motivo por el cual se dispuso la paralización. En consecuencia, más de mil residentes enfrentan dificultades para transportarse entre anexos.

Tras cinco años de estancamiento, el proyecto vial en Toro fue reactivado en noviembre de 2024 por el Gobierno Regional de Arequipa. La obra, valorizada en más de S/ 7 millones 500 mil, fue adjudicada bajo la modalidad de contrata al Consorcio Vial Arequipa, integrado por las empresas Grupo H y S SRL y Contratistas Persan SAC. Aunque la intervención busca mejorar más de 11 kilómetros de vía, durante una visita de fiscalización de los consejeros regionales se constató que solo se removió tierra y se trazaron las vías, sin mayores avances.

«La obra se ejecuta en una zona accidentada. Durante la fiscalización se evidenció que no había maquinaria ni personal en el lugar. (…) Se nos informó que la empresa [Consorcio Vial Arequipa] no contaba con garantías financieras, por lo que no contrataba al personal correspondiente. Por ese motivo, la GRI, en coordinación con los encargados de obra y el supervisor, decidió la paralización», declaró Yesenia Choquehuanca Cruz, consejera regional electa por Caylloma.

La vía conecta la capital del distrito de Toro con los anexos de Cupe y Caspi, además de los anexos de Sancay y Huanuca, en el distrito vecino de Quechualla.

Más de mil residentes continúan afrontando dificultades ante la falta de vías, trasladándose a pie o en transporte tradicional sobre cuadrúpedos. Se solicitó que la GRI priorice la reactivación del proyecto, especialmente porque existen observaciones debido a que el trazo vial compromete ojos de agua, en perjuicio de la población.