Alerta y fumiga tu casa contra las chirimachas

Mal de Chagas afecta al cerebro, al aparato digestivo y puede ocasionar una muerte repentina.

Por Danna Felipe B.

Las chirimachas viven en lugares sucios y desordenados. Salen por la noche para picarnos. La sangre es su alimento y, en ese proceso, también pueden transmitir la enfermedad mortal de Chagas. Para prevenirla, lo adecuado es limpiar y ordenar bien nuestras casas. Pero si ya hemos detectado la presencia de estos insectos, es nuestro deber alertar al establecimiento de salud más cercano para que procedan con la fumigación, porque no solo tu salud está en peligro; una propagación nunca puede descartarse.

El inspector sanitario de la Gerencia Regional de Salud de Arequipa, Edgar Manzaneda Salas, se dirige a la población arequipeña para pedirle que actúe preventivamente contra esta enfermedad, capaz de ocasionar muerte súbita y otros síntomas que afectan el cerebro, el corazón y el aparato digestivo.

Síntomas:

Mareos, desorientación, descoordinación, crecimiento del corazón palpitaciones discontinuas, cansancio fácil, hinchazón de los pies, crecimiento y torsión del intestino, estreñimiento crónico y dificultad para digerir los alimentos.

Si ya se ha detectado la presencia de chirimachas, se debe alertar inmediatamente al establecimiento de salud más cercano o comunicarse al 989 279 579. El personal de salud brindará la información necesaria sobre las consecuencias de la presencia y tendrá como principal objetivo que la familia acepte la fumigación, incluyendo áreas colindantes por precaución.

“A veces no quieren, es gratis, pero la vivienda debe prepararse: se deben retirar almanaques, cuadros, espejos, mover camas y muebles, colocar los objetos en el centro y taparlos. Es como si fuéramos a pintar; el insecticida se aplica y se fija en la pared, y dura medio año. La recomendación es que después no tenga que pasarle nada”, explica Manzaneda Salas.

Obviamente, ese mismo día de la fumigación se pueden reacomodar los muebles sin pegarlos a la pared y continuar con las actividades cotidianas.

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