Aumentan las denuncias de violencia familiar contra varones en Arequipa
Director del Centro de Capacitación Cognitiva, Santos Pantigoso.
El director del Centro de Capacitación Cognitiva, Santos Pantigoso Santillana, advirtió que las recientes estadísticas sobre violencia familiar contra hombres en Arequipa revelan una situación “alarmante y aún invisibilizada”. Ayer se celebró Día Internacional del Hombre
SON 1 133 CASOS
Según explicó, los datos oficiales del INEI y del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) muestran un crecimiento sostenido de denuncias y solicitudes de ayuda por parte de hombres víctimas de agresión en sus hogares.
De acuerdo con el INEI, solo entre abril y junio de 2024, se registraron 1 133 denuncias de violencia familiar contra hombres en Arequipa. El panorama no mejoró en el siguiente trimestre: entre julio y setiembre del mismo año, el 16.7 % de todas las denuncias presentadas en comisarías correspondieron a varones, una proporción superior a la reportada en años anteriores.
El incremento se hizo aún más evidente en 2025. Entre enero y julio, 1 836 varones acudieron al programa Warmi Ñan del MIMP para solicitar apoyo por violencia familiar. Según Santos Pantigoso, más del 85 % de estos casos corresponden a violencia psicológica, manifestada en insultos, humillaciones y conductas de control. El resto de las denuncias involucran agresiones físicas y económicas, que también mantienen una tendencia al alza.
Las comisarías de la región también registran este fenómeno. La dependencia de Cerro Colorado contabilizó 242 denuncias de varones víctimas de violencia en 2025. Mientras que la Línea 100 atendió 1 360 llamadas de hombres que buscaban orientación psicológica o soporte emocional ante situaciones de maltrato en el hogar. Estas cifras confirman, según Pantigoso, que los servicios de atención están recibiendo un flujo creciente de usuarios masculinos.
Sin embargo, el especialista advierte que las estadísticas disponibles no reflejan la totalidad del problema debido a un persistente subregistro. Muchos hombres —explica— evitan denunciar por miedo al estigma social, la vergüenza o la creencia de que las instituciones no tomarán en serio sus testimonios. Esto provoca que numerosos casos permanezcan ocultos, sin acceso a soporte emocional o protección.
La violencia familiar contra varones puede adoptar diversas formas, desde la psicológica hasta la física, económica o sexual. Sus efectos, señala Pantigoso, impactan directamente en la salud emocional, la autoestima y la estabilidad laboral y familiar de quienes la sufren. En muchos casos, los hombres tardan años en buscar ayuda debido a la normalización de la violencia o la presión social para “mantener silencio”.
Frente a este panorama, especialistas y organizaciones de apoyo reiteran la urgencia de visibilizar la violencia masculina y fortalecer canales de ayuda que garanticen atención oportuna a todas las víctimas, independientemente de su género. “Reconocer el problema es el primer paso”, quien añadió que la prevención y la educación deben dirigirse a toda la ciudadanía para romper los estereotipos que siguen dificultando las denuncias.
DENUNCIAS FALSAS CONTRA HOMBRES
En los últimos meses, especialistas del ámbito psicológico y legal han advertido un incremento de casos en los hombres habrían sido denunciados falsamente, situación que genera graves consecuencias tanto para ellos como para sus familias. Desde el Centro de Capacitación Cognitiva, ubicado en la calle Álvarez Thomas 400, señalan que esta problemática viene afectando especialmente a padres que enfrentan procesos judiciales que les impiden ver a sus hijos.
Según explicaron profesionales de la institución, en el consultorio se han atendido diversos casos de hombres envueltos en denuncias que luego se demostrarían infundadas. “Hay papás que no pueden ver a sus hijos; inclusive, a veces los menores son llevados a cámara Gesell”, indicaron. Recordaron que esta sala de doble ambiente con vidrio de visión unilateral se utiliza en el ámbito forense para registrar entrevistas protegidas, por lo que implica procesos delicados vinculados a denuncias graves.
Los especialistas destacaron que la Cámara Gesell se emplea principalmente para investigar acusaciones de violación o tocamientos indebidos, lo que hace aún más complejo el proceso para quienes resultan inocentes. “Imagínense: a veces los papás no han cometido ningún delito y se ven envueltos en estos problemas”, señalaron. Añadieron que estas situaciones no solo generan afectación emocional, sino también estigmatización social y dificultades en la relación con sus hijos.
Entre los casos mencionados, se recordó el del exfutbolista Jefferson Farfán, cuyo primo fue acusado, pero luego liberado tras no probarse los hechos. “Así como ese, tenemos varios casos en el consultorio”, señalaron, advirtiendo además que muchos niños y adolescentes no reciben una educación adecuada sobre los riesgos de sus actos, lo que puede originar malentendidos o situaciones que escalen sin fundamento suficiente.
El Centro de Capacitación Cognitiva informó que brinda asesoría legal y acompañamiento integral en este tipo de procesos, que describen como altamente demandantes para los varones implicados. “Trabajamos con psiquiatras, médicos y abogados. Tenemos un equipo complementario para apoyar a quienes atraviesan estas situaciones”, afirmaron, subrayando la importancia de un abordaje técnico, responsable y respetuoso de los derechos de todas las partes involucradas.
