ALFREDO ALVAREZ DÍAZ: “Busco un Colegio moderno, eficiente, dotado de tecnología y transparente”
Alfredo Álvarez, candidato al Colegio de Abogados de Arequipa.
El candidato al Colegio de Abogados de Arequipa (CAA) con el número 6, Alfredo Álvarez Díaz, presentó una amplia propuesta institucional centrada en la modernización, el fortalecimiento académico y el bienestar social de los más de 15 mil profesionales que integran la orden.
Durante su exposición, afirmó que el Colegio debe aspirar a convertirse en un referente nacional en materia jurídica y de gestión institucional.
Álvarez Díaz señaló que uno de sus principales objetivos es recuperar la tradición jurídica arequipeña y preservar el legado de la Academia Lauretana, reconocida por su aporte histórico al pensamiento legal. Sostuvo que esta herencia cultural debe seguir inspirando la formación de nuevas generaciones de abogados.
El candidato enfatizó la necesidad de contar con un Colegio moderno, eficiente y dotado de tecnología, capaz de garantizar su funcionamiento durante los próximos cien años. En su opinión, la transformación digital es indispensable para responder a las demandas del ejercicio profesional contemporáneo.
Explicó que la institución no solo debe enfocarse en ofrecer capacitaciones o acceso a herramientas tecnológicas, sino también en mejorar las condiciones de vida del abogado. Este enfoque integral, dijo, debería replicarse en otras entidades profesionales del país.
CUATRO EJES DE DESARROLLO
Álvarez Díaz recordó que su equipo ha estructurado la campaña en cuatro ejes de desarrollo, los mismos que —según indicó— ya fueron impulsados en su anterior gestión y ahora buscan consolidarse.
El primer eje es la alta especialización, que comprende maestrías, diplomados, debates jurídicos e iniciativas legislativas orientadas al fortalecimiento académico y la formación continua.
El segundo eje se centra en el impulso tecnológico. Destacó que en gestiones previas se entregaron tablets y laptops a los agremiados, y anunció que próximamente se incorporarán impresoras como herramientas básicas del ejercicio profesional. Agregó que la inteligencia artificial deberá ser incorporada en este proceso de modernización.
El tercer eje apunta a fortalecer la cultura institucional y los valores que históricamente han caracterizado al gremio. Para Álvarez Díaz, esta dimensión es clave para recuperar la ética profesional y la confianza ciudadana en el sistema de justicia.
El cuarto eje está enfocado en el bienestar social, aspecto en el que el candidato subrayó la viabilidad técnica de sus propuestas. Entre los programas anunciados destaca la Villa del Abogado, que contempla la entrega de lotes de 120 metros cuadrados para los miembros que no posean vivienda, además de alternativas para quienes ya la tienen.
RENOVACIÓN DEL PARQUE AUTOMOTO Y ACCESO AL CRÉDITO
Otra de sus propuestas es la renovación del parque automotor de los agremiados. Álvarez Díaz explicó que, gracias a la próxima apertura del puerto de Chancay y la llegada masiva de vehículos, será posible negociar precios y condiciones favorables que permitirían adquirir automóviles nuevos desde 9 mil o 10 mil dólares.
Asimismo, anunció la gestión de convenios con el sistema financiero para ofrecer líneas de crédito accesibles destinadas a la compra de viviendas, vehículos, mejoras de oficinas y emprendimientos personales. “Por el número de abogados colegiados, existen condiciones para obtener beneficios superiores a los del mercado tradicional”, afirmó.
MODERNIZACIÓN DE ESPACIOS
El candidato al Decanato del Colegio de Abogados de Arequipa, Alfredo Álvarez Díaz, quien postula con el número 6 para el periodo 2026-2027, destacó su propuesta de modernización integral de la institución.
Uno de sus principales objetivos es renovar el Club del Abogado en Arequipa e inaugurar el Club de Playa en Mejía, espacio que —según precisó— “nunca fue abandonado”, sino que atravesó un proceso legal para recuperar su posesión. Añadió que actualmente se construyen los muros perimétricos y que su meta es poner el club al servicio de los agremiados y sus familias.
Asimismo, señaló que uno de los retos actuales es que los espacios del Colegio sean compartidos también por las familias de los abogados, y no solo por los profesionales. Para Álvarez, la administración eficiente de los recursos es clave para alcanzar estos objetivos y garantizar el desarrollo integral de la institución.
RECUPERAR VALORES Y LIDERAZGO
El Colegio de Abogados de Arequipa (CAA) mantiene una historia profundamente ligada al desarrollo intelectual de la ciudad. Sus orígenes se remontan a la Academia Lauretana de Ciencias y Artes, que impulsó las carreras de Derecho y Medicina en Arequipa, y dio lugar a instituciones emblemáticas como el Colegio Independencia y la Universidad Nacional de San Agustín.
Desde mediados del siglo XX, el CAA se consolidó como un espacio de ejercicio profesional de alto nivel, contribuyendo a la tradición jurídica arequipeña, por décadas un referente nacional, recordó Álvarez Díaz.
Sin embargo, ese prestigio —advirtió— ha perdido fuerza en los últimos años. A su juicio, esta disminución está relacionada con la crisis política y social que atraviesa el país: un Congreso desacreditado, instituciones debilitadas y una sociedad civil fragmentada.
A ello se suma la ausencia de pronunciamientos del CAA frente a la coyuntura nacional, especialmente durante los dos últimos años, pese a la crisis que afecta al Poder Judicial, la Fiscalía y el Ministerio Público.
El exdecano recordó que, durante su gestión, el Colegio mantuvo una presencia activa, emitiendo más de 23 pronunciamientos y proponiendo reformas como la eliminación de la provisionalidad en el Poder Judicial y el Ministerio Público, así como la revisión del rol de la Junta Nacional de Justicia.
“La existencia de más del 60 % de jueces y fiscales provisionales debilita la justicia al no estar sometidos a controles suficientes ni a procesos rigurosos de selección”, afirmó.
Además de estos retos estructurales, el CAA enfrenta una crisis interna vinculada a la pérdida de valores en el ejercicio profesional. Para el gremio, es fundamental recuperar el rol del abogado como mediador entre el ciudadano y la justicia, e impulsar la participación activa del Colegio en la evaluación de magistrados, el debate jurídico y la propuesta legislativa.
El desafío —concluyó Álvarez Díaz— es reconstruir el liderazgo histórico del Colegio de Abogados de Arequipa y reafirmar su compromiso con el fortalecimiento del sistema de justicia.
