Por Jorge Turpo Rivas

El presidente de la Comisión Regional Ambiental, Zacarías Madariaga, sostiene que proteger el Centro Histórico de la contaminación es un primer paso que debe extender al resto de la ciudad.

EN 5 AÑOS TENDREMOS 100 MIL VEHÍCULOS MÁS

La prohibición del ingreso de vehículos al Centro Histórico de la ciudad, una vez por semana, conocida como “plaqueo”, sí tuvo resultados positivos en la reducción de la contaminación ambiental en las calles del centro de Arequipa.

El presidente de la Comisión Regional Ambiental, Zacarías Madariaga, recuerda que cuando se implementó la medida en la gestión del exalcalde, Omar Candia Aguilar, se hizo un estudio que consistió en hacer evaluaciones de la calidad del aire en la Plaza de Armas y calles aledañas, antes y después de la aplicación del “plaqueo”.

“Se hizo el monitoreo y los resultados comparativos demostraron que los niveles de contaminación se redujeron hasta en un 30%. Estamos hablando de los días en que el ‘plaqueo’ se aplicó de manera rigurosa para todos los vehículos, ahí funcionó muy bien”, dijo Madariaga.

El objetivo del “plaqueo” fue reducir los efectos de la contaminación del aire en la salud de las personas y conservar el patrimonio arquitectónico del Centro Histórico. Los gases contaminantes corroen el sillar del cual están hechas las casonas y monumentos históricos.

Sin embargo, según Isidro Flores, dirigente de un gremio de taxistas, el “plaqueo” se convirtió en una medida que sólo busca recaudar dinero aplicando multas a los conductores.

El propio alcalde provincial, Víctor Hugo Rivera, aparece en un video de su campaña electoral prometiendo la eliminación del “plaqueo” porque considera que los 5 mil 150 soles de multa por incumplir la norma es excesivo.

Aunque la autoridad municipal no ha prometido la eliminación del “plaqueo”, sí decidió eliminar los operativos de control a los taxis que ingresan al Centro Histórico.

UN DÍA SIN AUTO

A decir de Madariaga, eliminar el “plaqueo” sería un retroceso en la implementación de medidas que buscan reducir la contaminación y el daño a la salud.

“Medidas como el ‘plaqueo’ son ejercicios graduales que se deben ir aplicando en la ciudad. Se empezó en el Centro Histórico, pero ya se debería pensar en cómo enfrentamos el problema de la contaminación en varios distritos y zonas congestionadas”, dijo.

Recordó ensayos como “un día sin auto” que se aplica en algunas ciudades de Sudamérica. En Arequipa se hizo antes de la pandemia, pero sólo en algunas horas de la mañana.

“Tenemos que pensar en medidas consensuadas con la población, no podemos imponer como ocurrió con las ciclovías en la gestión de Omar Candia. Es un proceso en que tenemos que involucrarnos todos porque se trata de nuestra salud y la calidad de vida en la ciudad”, apuntó.

Actualmente, el parque automotor de Arequipa supera las 350 mil unidades y según cifras oficiales, cada año ingresan a circular 18 mil automóviles nuevos. Es decir, en cinco años, tendremos 100 mil vehículos más en las calles y avenidas.

“Ese es un asunto de alerta. El caos vial que soportará la ciudad será impresionante si no tomamos medidas ahora, como la construcción de los anillos viales que ayuden a descongestionar las calles y avenidas más usadas actualmente. La carga vehicular implica pérdida de horas hombre, deterioro de la salud de las personas y un costo que afectará nuestra economía”, explicó el especialista.

Otro punto fundamental, agrega Madariaga, es consolidar un sistema de transporte público óptimo que evite que las personas tengan que usar vehículos particulares o taxis que generan más congestión.

Pero la realidad demuestra que Arequipa todavía está lejos de tener un buen servicio. El Sistema Integrado de Transporte (SIT) continúa en la fase pre-operativa y sin avance porque la autoridad municipal no llega a un entendimiento con las empresas concesionarias del servicio.

Esta situación ha provocado el incremento de la informalidad en el transporte y que la cantidad de taxis se multiplique por la alta demanda.

Mientras tanto, la calidad del aire se sigue deteriorando. La presencia de PM10 (material particulado u hollín) en el ambiente, supera los límites permisibles que establece la norma. Las zonas más contaminadas, según el monitoreo de la Dirección de Salud Ambiental, son las avenidas Avelino Cáceres, Ejército, Juan de la Torre, Goyeneche, entre otras.