Por: Adrian Quicaño Portugal

Indicies de detenidos y bandas operando en todas las esferas resulta escalofriante.

El año 2024 será recordado para muchos, como el año más violento en la historia de este país. Los asesinatos, los asaltos y lo extorción se dispararon desbordando a Policía y evidenciando la falta de capacidad de las principales autoridades. Sangre y disparos fueron las noticias más comunes en el día a día, los autores tanto nacionales como extranjeros. La Policía Nacional del Perú (PNP) informó que finalizado año pasado lograron la detención de 362 262 delincuentes por diversos delitos.

Este increíble numero revela que el 1% porciento de los habitantes de Perú, tristemente está involucrado en algún hecho delictivo. Un numero que ha ido en aumento en los últimos años y se evidencia en la creciente ola y en la crudeza con los que estos malos elementos vienen actuando. Esto solo considerando las estadísticas dadas por la policía, porque la realidad en las calles parece ser más alarmante.

En cuanto a la influencia de los detenidos extranjeros, las cifras revelan que ellos representan el 2%. Ya que 271 738 son de nacionalidad peruana, 16 743 son extranjeros y 73 781 eran requeridos por las autoridades de justicia. Lo que también resulta preocupante es el crimen organizado. Las operaciones policiales en todas las regiones del país, desarticularon de 13 005 bandas delictivas y 237 organizaciones criminales inmersas en diferentes delitos, entre ellos la extorsión, el sicariato y el robo agravado.

Aquí es importante destacar que muchas de las organizaciones criminales no solo son delincuentes comunes a mano armada. Existe una creciente articulación entre bandas y personajes de poder y autoridades públicas, lo que demuestra que los malos elementos están en todas las esferas sociales. Lo mismo ocurre al interior del Poder judicial, Fiscalía y Policía.

Para el decano del Colegio Profesional de Sociólogos en Arequipa, Francisco Huanca, más allá de los números, todos somas parte de este problema y todos tenemos que ser participes para mejorar esta preocupando realidad que nos toca afrontar “Es un trabajo que se debe hacer como sociedad para disminuir la violencia, es un trabajo en conjunto. Necesitamos que no prime el individualismo. La gente se anda disparando por un celular, no les interesa el prójimo”

En ese sentido el especialista señala que la informalidad eleva los números de delincuentes. No hay empleo, tampoco se trabaja para que haya generación, la gente no tiene en que ocupaese. Muchos se ven orillados a tomar una mala decisión por la necesidad o el facilismo.

Mas Jóvenes

Los jóvenes más propensos a cometer errores. El año pasado también mostró que gran numero jóvenes están involucrados en hechos ilícitos. “Aquí la familia cumple un papel primordial. Es fundamental retomar el valor de la familia, algo que el estado no ha atendido. Aquí muchas veces la desocupación y el entorno juega en contra. Los jóvenes salen del colegio, no tiene que hacer, están todo el día en internet, tratan de conseguir dinero fácil y se ponen a hacer cosas negativas” resalta Huanca Ramos.

Finalmente se ve que en el ámbito profesional hay una pérdida de valores, ya que en las bandas desarticuladas muestra que entre sus integrantes se encuentran autoridades, ediles, judiciales, policiales, etc. Esto se da por un sentimiento de egoísmo, no interesa pasar por encima del prójimo con lograr lo que desea. De igual manera el colega que sabe de tu mal actuar prefiere simplemente no meterse o no le interesa.