Un ministro distinto
Por: Carlos Meneses
“La diferencia salta a la vista entre los equívocos frecuentes de los ministros y la distinta manera de actuar del ministro del Interior, Mariano González”.
Satisface comprobar que el recientemente designado ministro del Interior, Mariano González es una especie de lunar benéfico en el gabinete ministerial que preside Aníbal Torres.
El titular de la cartera mencionada no vaciló un minuto en reconocer que los hombres de prensa del programa Cuarto Poder resultaron ser víctimas de la comisión de un delito por parte de ronderos de Cajamarca quienes participaron del secuestro y de la extorsión sufrida por los periodistas de investigación del programa periodístico citado.
No tuvo duda en reconocer las graves circunstancias del hecho y al presentarse ante el Congreso de la República fue severo en confiar que el Ministerio Público castigará los excesos cometidos y pondrá en su sitio a quienes equivocaron sus lealtades para con la ley y el derecho ciudadano a libre tránsito y a la circulación a la que tenemos derecho todos los ciudadanos.
Debe resaltarse la diferencia entre el decir y el hacer del señor González con lo que está ocurriendo en otras dependencias estatales donde, y al contrario del trabajo del titular del ministerio del Interior, se cometen excesos que lindan con el delito en el uso de bienes públicos o en el desconocimiento de normas vigentes.
Por eso debemos respaldar las expresiones del ministro del Interior, confiar en que merecerá el respaldo de todos en la tarea de devolver confianza y esperanza en una rectificación del quehacer gubernamental del presidente Castillo, de su gabinete al borde de que llegando el 28 de julio, fecha del aniversario nacional, se anuncien cambios importantes en un país que está a punto de perder la calma por las constantes infracciones que se cometen contra las disposiciones ley y el orden.