Se liberó la Panamericana Sur luego de enfrentamientos que dejaron un fallecido
Por Jorge Turpo R.
Tránsito se reestableció en la Panamericana Sur. Policía llegó a la región para liberar tramos bloqueados por manifestantes mineros.
MINEROS INFORMALES DAN TREGUA
Los tres puntos bloqueados en Alto Siguas, Ocoña y Chala fueron liberados tras la intervención de la policía que tuvo que hacer uso de la fuerza para recuperar el orden.
Luego de casi dos semanas de paralización, violencia e incertidumbre, la tarde de ayer, el tránsito en toda la Panamericana Sur fue finalmente restablecido. El último punto en ser despejado fue el sector de Ocoña, en la provincia de Camaná, donde los mineros informales aún impedían el paso de vehículos. La liberación se completó cerca de las tres de la tarde, tras la intervención de la Policía Nacional del Perú.
Más temprano, los agentes del orden ya habían logrado recuperar el control de otros dos tramos claves: Alto Siguas, en Arequipa, y Chala, en la provincia de Caravelí. Fue precisamente en este último distrito donde se registró el episodio más grave de la jornada: un hombre de 37 años falleció durante los enfrentamientos entre manifestantes y efectivos policiales.
El fallecido fue trasladado al centro de salud de Chala, pero llegó sin vida. “Es una persona de sexo masculino de 37 años que ingresó presentando una herida en el pecho”, confirmó Walther Oporto, gerente regional de Salud de Arequipa.
Sin embargo, hasta el cierre de esta nota, aún no se ha determinado la causa específica de su muerte. “Tenemos que esperar la confirmación del médico legista, que aún no ha llegado a la zona”, añadió Oporto.
Tampoco se ha establecido si la víctima participaba de la protesta. “Algunas personas señalan que era un manifestante; otros, que simplemente pasaba por el lugar. Eso ya no nos corresponde determinarlo”, precisó el funcionario.
Los enfrentamientos también dejaron seis personas heridas: tres civiles y tres policías, todos con lesiones policontusas, según el reporte médico.
Además, se registraron varios niños afectados por la inhalación de gases lacrimógenos. “Uno de ellos ya ha sido atendido, y los demás fueron dados de alta de inmediato”, explicó el gerente regional.
Durante la operación policial en el kilómetro 619 de la Panamericana Sur, se detuvo a tres personas por disturbios. Los detenidos fueron trasladados a dependencias policiales de la zona mientras se determina su situación legal.
UNA TREGUA CONDICIONADA
La tensión comenzó a ceder cuando las organizaciones convocantes del paro, entre ellas la Confederación Nacional de Pequeña Minería y Minería Artesanal del Perú (Confemin) y la Federación Nacional de Pequeños Productores Mineros y Mineros Artesanales (Fenamarpe), anunciaron una tregua de 24 horas a nivel nacional.
La condición: que el Ejecutivo instale de inmediato una mesa de trabajo encabezada por la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) para atender sus demandas.
El conflicto —que estalló el lunes 30 de junio— se intensificó en los últimos días, con bloqueos simultáneos en varios tramos de la Panamericana Sur. La protesta de los mineros informales tiene como eje central su rechazo al proceso de depuración del Registro Integral de Formalización Minera (REINFO), que excluyó a cerca de 50 mil mineros por no continuar con el trámite de formalización.
Desabastecimiento en el sur
Las consecuencias del paro se sintieron con fuerza en toda la región sur del país. Arequipa quedó virtualmente desabastecida de gas licuado de petróleo (GLP), frutas, verduras y otros insumos esenciales. El impacto se multiplicó debido a la falta de vías alternas, dejando a la ciudad paralizada por varios días.
Desde el sector empresarial, las voces de alerta se convirtieron en llamados urgentes a la acción. Carlos Fernández, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa, saludó la recuperación de la vía, pero lamentó el costo humano del operativo. “Es una tragedia que haya habido un fallecido. Esta situación nunca debió llegar a estos niveles”, declaró.
Fernández también hizo un llamado al Ejecutivo para que aborde de una vez por todas el fondo del problema: la formalización de la minería artesanal. “Este conflicto no se resolverá con más represión ni con treguas temporales. Hay que encontrar una solución estructural, técnica y política para los miles de peruanos que están atrapados entre la informalidad y el abandono del Estado”, enfatizó.

Por ahora, la calma vuelve a la Panamericana Sur. Pero el conflicto continúa latente. La tregua de 24 horas corre, y con ella, la cuenta regresiva para que el Gobierno responda con acciones concretas. La población del sur, mientras tanto, espera no volver a quedar, una vez más, atrapada entre los intereses de siempre y la inacción de siempre.
