Por Julio Lopera Quintanilla. (*)

Sueño Precolombino nos ofrece la obra de un pintor cuya imaginación se desborda, una creación que nos presenta la pintura de un artista que desea viajar en el tiempo al pasado prehispánico, de un artista que busca aproximarse a los antecedentes culturales y sanguíneos del Perú precolombino por medio del arte de los tiempos prehispánicos buceando entre las imágenes de los ceramios, las esculturas y los tejidos de las culturas Mochica, Tiahuanaco, Cuspinique y otras culturas andinas que forman parte de la rica herencia social y cultural del Perú reflexionado acerca de lo que somos y lo que seremos mañana.

En estos días, tuve la oportunidad de conversar con Juan Carlos Rodríguez Farfán fundador de Ekeko et Compagnie, institución parisiense dedicada a la promoción, investigación y creación artística con sede en París, Francia. Desde 1997, ha tenido a su cargo la producción y organización de espectáculos artísticos de diversa índole con artistas de los cuatro continentes.

Juan Carlos Rodríguez Farfán exhibe el título profesional de licenciado en Cine y Teatro por la Universidad de París, Francia y el grado académico de magíster en Actuación y Danza por el Instituto Topeng de Balí, Indonesia. Se ha desempeñado como docente en el Teatro Nacional y el Conservatorio de la Universidad San Pablo. Ha sido, asimismo, director de la Biblioteca Regional Mario Vargas Llosa. Va la conversación.

¿Cómo iniciaste tu transitar por el mundo del arte?

Yo comencé escribiendo poesía. Allá, por los años ochenta del siglo pasado, dirigí la revista de literatura Letra Pueblo que publicaba inicialmente poemas de autores de la región para luego pasar a publicar composiciones de poetas a nivel nacional. Poco tiempo después, me interesé por la música y el teatro. He tenido la suerte, desde que tenía veinte años, de practicar estas artes de manera ininterrumpida hasta la fecha.

¿Te interesa mucho la cultura del Perú prehispánico?

De sobremanera, estoy convencido que somos herederos de una civilización extraordinaria y maravillosa. Los logros en términos de arquitectura, ingeniería, medicina, artes diversas han sido tan grandes que naturalmente deberíamos ser una potencia mundial, si alguna lógica existiera,

Lastimosamente no es el caso, por muchas razones históricas, dentro de las que hay que considerar la ruptura traumática que significó la conquista española. Sin embargo, creo que es necesario reconectarnos con nuestro pasado precolombino para tomar consciencia del valor histórico del Perú y el rol preponderante que podemos jugar como peruanos en el mundo actual, si buscamos las ocasiones propicias para ello. No todo está perdido

Tú representas en tu pintura algunas expresiones de las culturas Moche, Paracas y Sechin ¿Qué es lo que más admiras de estas civilizaciones?

Su extremada sofisticación y originalidad. Han sido culturas que poseían una visión original del universo. Los restos arqueológicos nos dan pistas de interpretaciones parciales, pero lo que queda claro es su vocación insobornable por la belleza y una cosmogonía que desafía toda mesura.

Los hombres del mundo precolombino eran unos locos hermosos que, hace miles de años, ya estaban a la vanguardia de cuestiones que ahora resultan urgentes, como son la conservación del planeta, el aprovechamiento racional de los recursos, el respeto a las plantas y a los animales.

La divinización del mundo animal no es como se ha pretendido erróneamente sostener debido a que estos tenían un afán “animista”, más bien se debe a su fascinación y respeto por todo ser vivo como fuente de sabiduría y vida.

¿Por qué la hidra, el felino y la serpiente?

Lo de hidra (monstruo de muchas cabezas), es una ocurrencia de Andrés Morales Mercado, curador de “Sueño Precolombino” con respecto a mi trayectoria artística.

Hasta antes de esta exposición, en el medio se me conocía como escritor, director de teatro, performer y ahora a mis sesenta y tantos años aparezco como pintor.

Bueno, digamos que me he estado aguantando muchos años antes de hacer conocer mi producción en el rubro de las artes plásticas.

Pinté el felino y la serpiente porque son dos animales sagrados en el universo precolombino. Y con justa razón. Debo confesar, sin embargo, que, en mi caso, la presencia de los felinos en esta exposición corresponde a una antigua y creciente fascinación que tengo por dichos animales. Yo puedo pasarme horas enteras contemplando a mi gato Mateo, y siempre lo encontraré grácil e intenso.

¿Tienes nuevos proyectos para el futuro?

Sí, claro. Pintar más y más. Ejecutar un mayor número de cuadros para incrementar la serie “Sueño Precolombino”, para presentarla en el Grand Palais de París, no, estoy bromeando (aunque por qué no).

Ahora que la vida me ha concedido un plazo suplementario, quiero realizar otra serie igualmente ambiciosa y por supuesto original. Será una serie con cuadros de grandes formatos, por ahora eso es lo único definido.

Sueño Precolombino es una propuesta plástica que tiene como una de sus finalidades dialogar con el espectador sobre los males de la sociedad actual como la violencia, el abuso de poder, la enfermedad y la muerte. Un mensaje estético que abre desde la representación del mundo prehispánico y sus íconos milenarios una puerta a la reflexión sobre la realidad social actual.

El Centro Cultural UNSA los espera para disfrutar de esta interesante exposición en su hermoso local de Santa Catalina 117 de martes a sábado en el horario de 8:00 a. m. a 8:00 p. m. ¡Todos son bienvenidos!