GABRIEL TARDE O LA SOCIOLOGÍA DE LA IMITACIÓN
Por Julio Lopera Quintanilla. (*)
Jean Gabriel Tarde, es un sociólogo, criminólogo y psicólogo francés cuya producción científica tiene que ver fundamentalmente con la criminología. Aborda el estudio de la realidad social desde una nueva perspectiva, centra su atención en las pequeñas interacciones que se dan entre los individuos y de modo particular en los procesos que tienen lugar a través de las mismas: la imitación y las invenciones.
Tarde explica que el delito es un resultado, es un producto de la vida social; para él, los individuos repiten un ejemplo instalado en la sociedad, no imitan a una persona particular, sino que imitan comportamientos, ideas y costumbres de otros, sobre todo de los que son figuras de autoridad. La imitación, en la sociología de Tarde, constituye la fuerza principal del cambio social y la evolución cultural.
Un factor de gran importancia en el proceso de la interacción social que hace posible que el hombre tenga una conducta delictiva es la “invención”, que tiene lugar cuando se desarrolla en el individuo una particular forma de pensar, sentir y actuar que resulta de la acción operante de un conjunto de influencias del contexto social que atraviesan la personalidad social del individuo combinándose de tal modo que dan origen a una creación novedosa y original que se denomina “invención”, si esta es imitada, será penalmente social y se dispersara por el medio dando lugar a la innovación.

Jean Gabriel Tarde, conocido como Gabriel Tarde, vino al mundo en Dordoña, Sarlat, actual Sarlat – La Canéda, la madrugada del 12 de marzo de 1843. Estudió la primaria y la secundaria en el colegio que tenía los jesuitas en su ciudad natal, en dicho centro educativo aprendió griego, latín e historia demostrando en sus años escolares una gran inteligencia. Cuando tenía 16 años, fue admitido en la Escuela Politécnica para estudiar matemáticas. A la edad de diecinueve años ingresó a la Universidad de Toulouse donde estudió derecho y se graduó de abogado.
El famoso académico e intelectual se desempeñó profesionalmente en la magistratura entre 1869 y 1894, ingresó al Poder Judicial como juez de instrucción en Sarlat, poco tiempo después le propusieron varios ascensos para que hiciera carrera dentro de la institución, esas propuestas no lo satisficieron. Se cuenta que en una ocasión expresó: “Quizás, no tanto por vocación, como por imitación y costumbre, ingresé en una época muy triste de mi vida a la magistratura”
Gabriel Tarde, sin desmerecer la labor profesional de los magistrados en la sociedad, estaba llamado a algo mucho más grande, su misión consistió en realizar valiosas investigaciones que lo llevarían a ser una de las más importantes figuras de la historia de la sociología.
En 1880, Gabriel Tarde entró en contacto con Théodule Ribot, editor y director de la Revuelta Filosófica de Francia y del Extranjero, una publicación dedicada a la historia del pensamiento clásico y contemporáneo. Envió al director sus primeros artículos, artículos en los que mostraba sus profundos conocimientos, su excepcional capacidad de análisis y su rigurosa inteligencia.
En 1886, publicó La Criminología Comparada, obra en la que ofrece una posición opuesta al determinismo de Cesare Lombrosso, médico italiano que sostiene que la criminalidad es innata y está determinada por factores biológicos y físicos.
Gabriel Tarde se casó en 1887 con Marthe Bardy Deslise, con ella tuvo tres hijos: Paul, Alfred y Guillaume. Los tres lo quisieron mucho y su esposa fue una mujer abnegada que se dedicó con gran cariño al hogar.
En 1890, vio la luz el libro Las Leyes de la Imitación, obra en la que el sociólogo francés plantea su conocida Teoría de la Imitación en la misma sostiene que la imitación es el motor más importante de la sociedad.
En 1893, fue invitado por el ministro de Justicia, en París, para preparar un trabajo sobre la estadística criminal. El trabajo fue exitoso, tuvo gran relevancia y sirvió muchísimo para las investigaciones futuras.
En 1895, publicó La Lógica Social, en esta obra el científico social señaló que la imitación es el agente fundamental del cambio social. Su enfoque se opone a las concepciones estructuralistas de la época.
