Por Jorge Turpo R. Fotos: Jorge Esquivel

“Los Buitres de la Capital”, es la banda integrada por 7 individuos. Seis fueron detenidos y uno todavía es buscado.

En menos de doce horas la Policía Nacional del Perú logró lo que parecía una persecución destinada a prolongarse: capturar a seis integrantes de la banda criminal conocida como “Los Buitres de la Capital”, responsables del asalto a una casa de cambios en pleno Cercado de Arequipa.

El general PNP, Olger Benavides Ponce de León, jefe de la Región Policial, confirmó que los detenidos —entre ellos dos mujeres— llegaron desde Lima con la única intención de ejecutar el atraco y fueron sorprendidos en un hostal del centro histórico.

El robo ocurrió el último viernes, a la 1:40 de la tarde, en la casa de cambios “Dólares J&M Inversiones A&N Inversiones”, ubicada en la avenida Venezuela, sector La Negrita.

Tres individuos encapuchados y armados irrumpieron en el local, intimidando a trabajadores y clientes.

Según la Policía, se llevaron un aproximado de 260 mil soles, tanto de la caja de la agencia como del dinero que una clienta se disponía a cambiar en ese momento.

“Se trató de un golpe planificado con precisión, pero nuestra reacción inmediata nos permitió acortar los tiempos de investigación y actuar en menos de un día”, declaró el general Benavides.

Las cámaras de seguridad captaron a los delincuentes vestidos de negro, con los rostros cubiertos y portando armas de fuego.

La fuga la realizaron en una camioneta Honda de color negro, que ni siquiera se dieron el trabajo de camuflar.
Testigos del atraco alcanzaron a tomar nota de la placa, lo que permitió orientar las primeras diligencias.

Horas después, el vehículo fue hallado abandonado en la zona limítrofe entre Chiguata y Paucarpata.

Al revisarlo, los agentes constataron que tenía una placa clonada. El número de serie confirmó que se trataba de una camioneta reportada como robada en Lima el pasado 7 de julio, también en un atraco a mano armada.

“Este detalle fue decisivo, porque demostró que se trataba de una organización con movilidad y recursos, que había logrado pasar los controles en carretera gracias a las placas falsas”, explicó el jefe policial.

SEGUIMIENTO

Las pesquisas llevaron a la Policía hasta el hostal Arequipay, en la calle San Francisco, a solo unas cuadras de la Plaza de Armas.
Allí, seis personas habían llegado esa misma tarde, cerca de las cuatro, alquilando tres habitaciones y pagando en efectivo.

Una de las mujeres de la banda fue seguida de cerca, lo que permitió confirmar que el grupo permanecía en el lugar.

El operativo se montó en la madrugada del sábado 23, con participación del Ministerio Público, y a la 1:30 de la mañana se ingresó a las habitaciones.

“En los cuartos se halló parte del dinero robado, todo en moneda nacional. No podemos precisar aún la cantidad exacta, pero es una prueba contundente de su implicancia en el asalto”, dijo Benavides.

Los detenidos fueron identificados como Víctor Manuel Pajuelo Roncero (20), Diego Mauricio Ortiz Badaracco (23), Álvaro Josué Rosales Ravina (25), Jean Carlos Álvarez de la Sota (32), Khaterine Espinoza Gaytán (35) y Pamela Casandra León Cordero (30).

Seis de ellos llegaron desde Lima, mientras que un séptimo integrante, natural de Arequipa y señalado como el proveedor de las armas, logró escapar.

“Estamos tras sus pasos y confiamos en capturarlo en breve. Ningún criminal puede sentirse seguro en nuestra jurisdicción”, aseguró el general.

De acuerdo con la investigación, la organización delictiva estaba estructurada para que cada miembro cumpliera un rol específico: campana, vigilancia, seguridad, atracadores y conductor para la fuga.

Se presume que la banda ya había perpetrado otros ilícitos en Lima y que había migrado al sur para replicar sus operaciones.

“Son delincuentes experimentados, dedicados a robos agravados de gran magnitud, pero que esta vez no lograron consolidar su escape”, puntualizó Benavides.

El golpe policial se considera uno de los más rápidos de los últimos meses en la región. En menos de doce horas se pasó del asalto a la captura de casi toda la banda, un tiempo récord para operaciones de esta envergadura.

El hallazgo de la camioneta robada, la colaboración de los transeúntes que proporcionaron la placa y la reacción inmediata de las unidades de inteligencia fueron claves para cerrar el cerco.

“La Policía Nacional continuará trabajando incansablemente hasta lograr la captura de todos los integrantes de cualquier organización criminal que afecte la tranquilidad de la población. Nuestro compromiso es garantizar la seguridad del patrimonio público y privado”, subrayó el general Benavides.

El caso de “Los Buitres de la Capital” revela un patrón que preocupa a las autoridades: bandas que se trasladan desde Lima hacia otras regiones para cometer asaltos de alto impacto económico.

El atraco en La Negrita puso en evidencia no solo la audacia de los delincuentes, sino también la vulnerabilidad de negocios como las casas de cambio, que concentran fuertes sumas de dinero en efectivo.

Aun así, la captura en tiempo récord envía un mensaje claro: en Arequipa, la Policía no da tregua. Un integrante sigue prófugo, pero el cerco está tendido y, como insiste Benavides, el crimen siempre deja un rastro.