El equipo de Juan Reynoso había dado vuelta al marcador adverso, pero en el minuto final el argentino Gregorio Rodríguez hizo un tonto penal que se convirtió en gol para los locales. El resultado final fue de 2-2 ante el ADT de Tarma. La victoria se escapó de las manos.

Hace rato que el FBC Melgar es un equipo deficiente en el aspecto técnico y mental. Se repite lo de la era Ribonetto, no hay capacidad de cerrar los partidos. No hay inteligencia para manejar los tiempos con el marcador a favor. Las posibilidades de ganar partidos pasan por breves momentos de buen fútbol o la fortuna.

Esos pocos momentos de idea clara se dieron en los minutos finales del partido ante ADT. Con un hombre más en la cancha era obvio que la ofensiva debería ser total. Así fue porque en cinco minutos lograron darle vuelta al marcador que era adverso. Los momentos de lucidez se aprovecharon al máximo. Los goles fueron a los 87’ y 92’, tiempos perfectos para sellar una victoria que los meta en competencia por el Clausura.

Sin embargo, los jugadores se nublan. Pierden la brújula del partido. Sienten que se gana antes de que se toque el pitazo final.

Pasados los 100 minutos de juego, Cuesta hace un foul cerca al área melgariana. Un tiro libre intrascendente. Sin peligro. Cuando el partido expiraba el árbitro cobró penal para los locales, el segundo a su favor. Una descarada falta de Rodríguez fue revisada por gusto en el VAR. Una clara falta, bien sancionada. Segundo gol de Nazanero y empate de 2-2 en Tarma. El resultado generó bronca en los jugadores y comando técnico. No hubo capacidad de asegurar una victoria que estaba en el bolsillo.

Juan Reynoso ensayó con Deneumostier en defensa y con Bordacahar, Vidales y D’Arrigo en ataque. Solo una llegada de peligro hubo en el primer tiempo. No hubo creativos en medio campo. ADT tampoco fue una maravilla. Solo pudo sacar ventaja con la ayuda del árbitro Christian Santos que inventó un penal de Deneumostier. Ni siquiera hubo revisión del VAR, la falta se cobró y fue gol.

Luego le favoreció al FBC Melgar la expulsión de Da Luz. Fue el envión para torma la iniciativa y volcarse al ataque.

Rodríguez, quien iba a ser figura del partido y considerado en el once ideal de la fecha fue providencial para lograr la remontada con un gol y una asistencia. Sin embargo, luego hizo un tonto penal y perjudicó a su equipo.

Melgar tendrá unos días de descanso para volver luego a los entrenamientos. Lejos de las posibilidades de ganar el Clausura queda la opción de asegurar la clasificación a un torneo internacional aunque sea terminando el año en el octavo lugar de la tabla.