Cantata a la Ciudad Caudillo nos lleva, en un trazo musical vigoroso  e inspirado, por las diversas estancias del espectro mítico de la emoción humana. Y hoy enuncia —con aún mayor intensidad— su canto lírico, dramático pero, sobre todo, heroico: en el amor a la tierra, a la amada y a lo divino que encarnan, también, los sentidos renovadores de un pueblo, y de la humanidad, en su profunda naturaleza de libertad y de esperanza.

La Cantata fue estrenada en el aniversario de Arequipa, el 15 de agosto de 1975, en pleno gobierno militar. Su mensaje cívico, poético y musical trasciende las épocas para recordarnos, en la actualidad, la necesidad de saber de dónde venimos (nuestra “génesis”), conocer dónde estamos (la búsqueda de un anhelo humano de libertad y de lirismo de la existencia) para reconocer y atisbar hacia dónde queremos ir (esa experiencia de una sociedad donde seamos, como dice la estrofa del último movimiento, “luz, paz y fe…”.

En el marco de esta conmemoración, vamos a realizar una jornada de conversatorios en torno a los aspectos artísticos, musicales e históricos de Cantata a la Ciudad Caudillo.

La primera jornada es el día 21 de noviembre, a las 6: 15 p. m., en el auditorio de la Biblioteca Mario Vargas Llosa. Contaremos con los maestros musicólogos y docentes Zoila Vega Salvatierra y Omar Carrazco. En esta sesión se realizará una audición de la obra con las correspondientes reflexiones y comentarios de los especialistas antes mencionados.

La segunda jornada es el día lunes 24 de noviembre, en la sala del Teatro Arequipay de la Municipalidad de Arequipa, se abordarán los sentidos históricos y poéticos de la obra a cargo de historiadores como Hélard Fuentes y Néstor Ríos, así como el poeta Florentino Díaz, hijo del compositor.

Con esta primera activación musical y reflexiva en torno a la obra de Jaime Díaz Orihuela buscamos recordar y recuperar el gran valor artístico y espiritual de un compositor que transformó en música académica la tradición de su pueblo y plasmó en sus obras experiencias de gran inspiración para el Perú y el mundo. En momentos de crisis planetaria y humana, es un deber fundamental enlazarnos con los sentidos de esperanza y de liberación del gran arte y de los grandes artistas.