Gran parte de los habitantes depende de los servicios de salud en la ciudad de Arequipa.

Redacción Diario El Pueblo

Si bien es cierto que en la provincia de Caylloma funciona el hospital de Majes, este no brinda atención a toda la población debido a que está ubicado en la parte baja. Acudir a la ciudad de Arequipa resulta más esperanzador. Por eso, más de un candidato provincial ha llegado con la promesa de viabilizar un hospital. Alfonso Mamani Quispe no fue la excepción; anunció que trabajaría de la mano con el gobernador regional Rohel Sánchez. Sin embargo, casi nada de aquel compromiso se ha tangibilizado.

El presidente de la Junta Directiva del Frente de Defensa de los Intereses de la Provincia de Caylloma, Román Espinel Cáceres, afirma que esta obra es muy importante. El Valle del Colca es uno de los lugares turísticos más visitados de todo el Perú, pero en sus distritos solo existen establecimientos de primer nivel de atención. La parte alta está en igualdad de condiciones. El único hospital de Caylloma está en Majes, el cual limita con la provincia de Camaná.

Para un gran número de cayllominos, la ciudad de Arequipa se ubica más cerca. Sin embargo, como en cualquier emergencia, el tiempo es el peor enemigo.

“Llegar hasta Arequipa también es lejitos, más de 3 horas; hemos tenido fallecidos a medio camino. Por eso la población exige tener un hospital. Cada pueblito tiene un establecimiento médico, pero solo hay lo básico”.

Lo que necesita la población es un establecimiento en el cual se realicen operaciones y que, cuando el caso sea complejo, el paciente sea referido al tercer nivel de atención en la ciudad de Arequipa, a los hospitales Goyeneche y Honorio Delgado Espinoza.

Espinel Cáceres informa que el alcalde provincial ha estado trabajando en el saneamiento del terreno para el futuro nosocomio, pero afirma que toda la obra avanza a paso lento y no hay la transparencia adecuada respecto a los avances. “Supuestamente el saneamiento ya estaría”.

Agrega que el gobernador regional prometió que desde el Ejecutivo Regional se brindarían todas las facilidades para que el hospital de Caylloma sea una realidad. Pero lo que se percibe, de momento, es un alejamiento.

“Él prometió su apoyo constante. Dejó su número de celular, pero ya no les atiende, no escucha, lo tendrá bloqueado, no se sabe. La gente también está decepcionada del actuar del gobernador de Arequipa».