Gran congestión del Terminal Terrestre. El incremento de los pasajes del servicio interprovincial en la ciudad de Arequipa generó malestar entre miles de usuarios durante las celebraciones por Navidad. Según se constató en los terminales terrestres, las tarifas aumentaron en más del 40 %, situación que motivó protestas y reclamos por parte de los viajeros.

POR FIESTAS DE FIN DE AÑO

Desde tempranas horas, los terminales terrestres registraron una alta afluencia de pasajeros que buscaban trasladarse a distintas regiones del país para reunirse con sus familiares o realizar actividades turísticas propias de la temporada.

Uno de los destinos con mayor demanda es la ciudad de Lima, donde los pasajes se ofertan entre 110 y 200 soles, dependiendo del tipo de servicio y la empresa de transporte. Los usuarios señalaron que estos precios superan ampliamente las tarifas habituales.

En el caso de Cusco, otro destino bastante solicitado durante estas fechas, los costos de los pasajes fluctúan entre 80 y 150 soles. La variación responde a la escasez de unidades disponibles y al incremento del flujo de pasajeros.

Tacna también presenta una elevada demanda, con precios que oscilan entre 60 y 110 soles. Muchos viajeros indicaron que, pese al alza, no tienen otra alternativa que pagar los montos establecidos para cumplir con sus planes.

Para los destinos más cercanos, como Puno y Juliaca, los minibanes ofrecen pasajes entre 40 y 50 soles, manteniendo precios similares entre ambas ciudades, aunque con ligeros incrementos en comparación a semanas anteriores.

Los pasajeros manifestaron su inconformidad señalando que las empresas de transporte suelen elevar sus tarifas durante las festividades de Navidad y Año Nuevo, aprovechando la alta demanda existente en estas fechas.

“La necesidad nos obliga a tomar el servicio de una unidad para visitar a un familiar o hacer turismo”, expresaron algunos usuarios, quienes pidieron mayor fiscalización por parte de las autoridades competentes.

Por otro lado, la Policía Nacional del Perú informó que, por disposición de sus altos mandos, se realizan vigilancias permanentes en las carreteras del sur, con el objetivo de garantizar la seguridad de los viajeros y prevenir accidentes durante el intenso movimiento vehicular.