— Redacción Diario El Pueblo —

Ambulantes, desorden e inseguridad, huecos en las pistas y calles sucias se han vuelto una constante en el Cercado de la ciudad en los últimos meses.

Una señora le reclama a una de las vendedoras de pan por la mala atención en la calle Victor Lira; mientras tanto una larga fila vehículos genera caos, congestión y contaminación ambiental (humos) y acústicas (bocinazos). Una trabajadora de limpieza pública cumple su labor, recoge basura de casi todas las esquinas. Un ciclista pasa por la ciclovía cuestionada y con casi la totalidad de los bolardos destruídos por malos conductores. Miles de conductores circulan por las estrechas calles y tratan de no caer en los enormes huecos de las pistas que dejan las lluvias. Estas son escenas que se observan viven a diario y a cada rato en el centro de Arequipa

Población y comerciantes han solicitado en reiteradas oportunidades a las autoridades municipales atender los problemas del Centro Histórico como el aumento de los ambulantes, calles sucias y llenas de huecos por las lluvias.

Tras acumulación de basura en calles aledañas y la informalidad, los comerciantes del mercado tradicional de San Camilo demandaron la atención de la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA) . El presidente de la Asociación de Trabajadores del centro de abastos, Cosme Casos Vilca, indicó que la problemática se viene suscitando por el aumento de comerciantes ambulantes en la zona. También demandaron más acciones para menguar la delincuencia e inseguridad de hace meses y que nadie hace nada, “hay total descuido e indiferencia para atender estos problemas”.

“Hemos conversado con las autoridades, lamentablemente no hacen caso para ayudar a reducir la gran cantidad de ambulantes que están en todo el contorno del mercado, ellos dejan ahí sus desperdicios y eso nos perjudica (…) las autoridades deben poner orden, los mercados y centros comerciales son para comerciantes, las veredas son para los peatones y las calles para el tránsito de vehículos”, refirió el dirigente.

Casos Vilca, indicó que, a partir del mediodía la calle Alto de la Luna se torna un foco infeccioso por la acumulación de residuos sólidos. Frente a ello, exhortó a los funcionarios de la MPA para que se implementen más operativos de control y fiscalización del comercio ambulatorio en la zona.

“Ya hemos conversado con la administradora, ella ha dicho que solicitara más contenedores de basura, para esa calle, pero ahí sucede otro problema, esos contenedores son llenados por dueños de los comerciantes aledaños al mercado y de nada sirve porque al llenarse rápidamente, empiezan a dejar su basura en la calle, eso agrava el problema, sobretodo ahora que afrontamos una emergencia sanitaria”, dijo.

En otro momento, el representante de los comerciantes lamentó que la delincuencia no se haya reducido en la zona pese a las últimas marchas que realizaron por diversas calles del circuito histórico. “Hemos quedado con el señor prefecto de la región para que convoque al general de la Policía Nacional y a las demás autoridades, pero no hay mayor respuesta”, enfatizó.

Asimismo, a pocas cuadras se ubica la calle Vìctor Lira y la avenida Dolores, donde se observa basura, ciclovías llenas de bolardos destruídos hace varias semanas, grandes charcos en las vías por las últimas lluvias .

En la avenida Jorge Chávez, Muñoz Nájar la situación es muy similar. También en la calle Sucre, hay establecimientos que no cumplen con los protocolos sanitarios, los fines de semana liban licor en la vía pública y nadie hace nada.

Una ciudadana, Rosa Flores Amésquita, sostiene que cada vez el Cercado parece “una jungla, es un desorden total, informales, basura, caos en el transporte, delincuencia; es evidente que el abandono y descuido de parte del alcalde provincial”.

Cuando oscurece se observa la prostitución en las zonas colindantes al centro de abastos San Camilo. En algunos casos, son los hoteles que fungen como fachada y ofrecen estos servicios.