Por: Carlos Meneses

Es permanente el riesgo en programas sociales locales porque operan bajo múltiples riesgos derivados de carencias en transparencia, rendición de cuentas e incorporación de la participación ciudadana.

Los programas sociales son un conjunto de instrumentos del gobierno que tienen por objetivo contribuir a mejorar las condiciones de vida de la población. Son financiados con recursos del Estado, dirigidos a la lucha contra la pobreza, apoyo a poblaciones vulnerables o al desarrollo de una mejor infraestructura para mejorar la calidad de vida de los sectores deprimidos; sin embargo de manera recurrente se han detectado numerosos y escandalosos actos de corrupción.

Es bueno que la ciudadanía participe en combatir la corrupción, pues este problema  requiere del involucramiento de distintas dependencias.

La corrupción en los programas sociales es un tema que debe preocuparnos seriamente, por el uso indebido e ilícito de fondos que deberían ser destinados a atender las necesidades de la población vulnerable y debemos preguntarnos cuánto gastamos en combatir la corrupción y qué se podría construir con todo el dinero malgastado. Calculan que en el último año fueron más de 24 mil millones de soles en pérdidas.

El Ministerio Público, como parte de la estrategia anticorrupción inició el operativo de prevención y persecución de actos de corrupción en los programas sociales Qali Warma y Vaso de Leche en numerosas regiones.

Con estas acciones se tiene como objetivo involucrar a la ciudadanía en la prevención de hechos de corrupción en los programas sociales a nivel nacional y evitar el perjuicio a los beneficiarios.

Asimismo, se debe informar a la población sobre los canales de denuncia ante indicios de este tipo de delitos.