Los dos amigos son investigados por presunto feminicidio, el doceavo en lo que va del año

Por: Danna Felipe B.

Uno de los dos detenidos por el presunto feminicidio de la madre Ingrid Ghersi Cejaz (22) en Paucarpata, el taxista Miguel Romaní Torres (47), hasta el momento guarda silencio respecto a lo que ocurrió ese fatídico día cuando la joven fue hallada sin vida en la habitación que él ocupaba. Mientras que, el otro imputado, el conviviente de la mujer Fermín Sanca Hancco (32), si bien dió su versión de lo sucedido, esta carece de lógica, de acuerdo al jefe de la Divincri, coronel PNP Fernando Portugal. Los dos varones son amigos e investigados por presunto feminicidio, el doceavo que registra la Policía en lo que va del año.

Para el coronel, Miguel se niega a dar su declaración para eludir una responsabilidad penal. Y es que, no se descarta la complicidad del taxista en este horrendo crimen.

Adicional a ello, la autoridad policial resaltó que la versión de Fermín no es coherente, ya que él aseguró que los hematomas y moretones en el cuerpo de su pareja son productos de una caída. «La víctima fue golpeada antes de fallecer», enfatizó Portugal Huanqui. Fermín negó haber asesinado a la joven madre.

En ese sentido, es importante mencionar que según la necropsia que se le practicó al cadáver de la mujer, la causa de muerte fue una asfixia mecánica por sofocación-oclusión, es decir, fue asfixiada con un objeto.

Según las investigaciones, los dos presuntos victimarios, la madre y la hermana de ella (18) estaban libando alcohol en el tercer piso del inmueble que alquilaba la pareja en el sector Miguel Grau, Paucarpata. A la madrugada siguiente, Sanca Hancco reportó la muerte de Ingrid en la comisaría jurisdiccional.

La Policía llegó a la vivienda y al ver las lesiones en el cuerpo de la joven, detuvo a los dos varones. Asimismo, la hermana de Ingrid acusó a Miguel de haberla ultrajado. El varón presenta varias denuncias por violencia física y psicológica. Es más, tiene prohibido acercarse a Percy T. M.. , quien lo denunció varias veces por agresión física.

Cabe mencionar que durante el interrogatorio del otro implicado, él refirió que tras compartir con las personas mencionadas se quedó dormido, despertó y encontró a su pareja sin signos vitales recostada en la cama de su amigo, versión que para la Policía también carece de coherencia.