— Redacción Diario El Pueblo —

Por: Fernando Chuquipiunta

Angie Mayte Quispe Carpio, joven cantautora puneña emergente. Desde muy pequeña demostró el talento de canto y redacción. Compone sus propias canciones y ha escrito algunas novelas que guarda en su colección personal, en espera de publicarlas pronto. Ganadora en diversos concursos de canto, composición y redacción. Además de interpretar diversas canciones puneñas y Latinoamericanas, cuenta con varios temas de su autoría, entre ellos, la canción “Vamos Peruanos”.

De profesión Ingeniero Economista pero apasionada por la música. Interpreta diversos géneros musicales, como el pop y balada, pero que además su voz yace inconfundible en las melodiosas melodías puneñas. Su pasión artística comenzó desde muy tierna edad en diversos concursos que ganaba, y posteriormente empezó a escribir sus propias composiciones, las cuales ejecutaba solo a guitarra y voz. Ahora es solista y sus canciones tienen un formato acústico, entre pop y folclor.

¿Desde niña se vio cantautora?

La verdad no estoy muy segura, me gustaba escribir mis propios relatos, poesías, y crear hasta historietas. Como todo niño era una persona con mucha imaginación, mi mamá que es profesora me invitaba a plasmarlo siempre, y me felicitaba por ello, por lo que aprendí a dejar salir todo eso que se me venía a la mente en dibujos y letras. Y cuando me fui entusiasmando con la música, descubrí que no me bastaba interpretar canciones de otras personas, sino se fue convirtiendo en una necesidad de plasmar lo que sentía, y lo que quería decir

¿Y cómo empezaste a cantar?

Es difícil expresar cómo comenzó todo exactamente, porque creo que es algo que simplemente sientes, te apasiona y sabes que tienes que hacerlo. Por lo que participaba en algunos concursos, festivales y el coro de la iglesia. Posteriormente realicé mis estudios de música en la universidad de los que aprendí mucho, para poder hoy sentirme preparada.

¿Cuál ha sido la canción que más te ha marcado?

Creo que las canciones te marcan en cada momento, tienen ese poder de transportarte en el tiempo, de acariciarte el alma. Pero sin duda alguna, ninguna canción puede marcarte como una propia, que en mi caso sería mi composición “Cartas del Pasado” que está en proyecto de lanzamiento. También podría decir que una de las canciones que me ha marcado ha sido “La Flor de la Canela” de una de las compositoras que más admiro de nuestro país, Chabuca Granda.

¿Cómo educas tu voz?

Entreno frecuentemente y tengo clases con un coach vocal en los que practico diferentes ejercicios para mejorar mi voz. Estudio también algunos libros como Vaccai, Concone y áreas de música lírica de la universidad. También estoy practicando más la guitarra y charango. Tengo mentalizado que debo seguir preparándome, y que el mayor error que podría cometer, sería creer que ya no hay nada más que aprender.

¿Qué mensaje se ven reflejado en tus canciones?

Muchas de ellas hablan de lo que podemos sentir en algún momento de nuestra vida. Si bien es cierto que la mayoría de mis canciones hablan de romance, porque creo fervientemente que el amor es el motor del universo, también tengo canciones que reflejan mi sentir como persona con respecto a la sociedad, esperando que las personas que las oigan puedan disfrutarlas, cantarlas y darle su propia interpretación. Demostrando que todos somos humanos, reímos, lloramos, nos emocionamos y tenemos algo por lo que cantar.

¿Qué significa ser cantautora en el Perú?

Todos tenemos una forma de expresar lo que sentimos, solo que a veces por diversas causas, como el trabajo y estudio, preferimos guardar “Eso” bajo el escritorio de una oficina, e incluso bajo una rutina agotadora. Y ser cantautora es tener el placer y la valentía de compartir cosas muy íntimas para con las demás personas. Por supuesto no es fácil que las personas acojan tus canciones con la misma intensidad que cuando oyen algo de siempre, pero esa sensación, de poder conectar con las demás personas, y que alguien se aprenda tus canciones, y te la pida en una presentación, es algo que te reconforta el alma, y no tiene precio.

¿Cómo definiría sus interpretaciones musicales?

Creo que es complicado encontrar una definición para una interpretación musical. Mi crecimiento musical ha sido nutrido de diferentes géneros musicales, de los cuales he aprendido y respeto muchísimo. Pero en especial, le he cogido muchísimo cariño a la música puneña, aunque a un comienzo creía que no encajaba con el estilo que muchos intérpretes de este género tienen.

Ahora que me he embelesado de ella, me doy cuenta que en realidad se trata de sentir, de poder vibrar junto a la música. Así que definiría mis interpretaciones musicales como “Sentimiento”.

¿Son varias las etapas en su interpretación musical?

Si nos referimos a la interpretación musical en sí, creo que depende mucho de la canción, de lo que quiere decir, del sentimiento. Uno debe vivir cada una de las letras que interpreta, solo así puede rendirle honor al compositor y conectar con las personas que le escuchan. Usualmente las etapas que se vive en una canción son como las de un relato, la presentación de la historia que se quiere contar, el desarrollo, el clímax y el cierre. Pero como toda obra artística, cada cual tiene su forma de ser, una huella irrepetible que solo se puede interpretar con el sentimiento de alguien que de verdad quiere entender al compositor.

¿Cuándo sabe que una canción está definida?

Desde mi punto de vista técnico, sobre todo en producción, es muy complicado saber cuándo una canción se encuentra lista. Siempre hay algo más que se puede hacer, algún arreglo que puede ir o no, y con respecto a ello depende mucho del enfoque que se le quiera dar a la canción. Pero desde mi perspectiva como compositora, y pueda que haya repetido la palabra “Sentimiento” muchas veces, porque creo fervientemente que es el eje en el cual gira el arte; creo que sabes que una canción está definida cuando sientes que tu canción dijo lo que tenía que decir, y te deja una enorme paz interior, y sabes que aquello que plasma es también lo que muchos viven y esperaban oír en algún momento.

¿Cuál crees que es el papel de un agente cultural para promover la cultura puneña?

Puno es una región con muchísima identidad cultural, algo que me gusta mucho es que todos los agentes involucrados buscan promoverla, y aplaudo la pasión y el esfuerzo que le ponen al momento de ejecutar un proyecto cultural. Como agente cultural, creo que el papel que tenemos todos nosotros es el de trabajar, trabajar y trabajar, en mi caso en el ámbito musical, para poder ofrecer algo con calidad y muchísimo cariño. Y de esta manera poder llevar el nombre de Puno junto con los resultados de mis proyectos.

¿En qué proyectos se encuentra trabajando ahora?

Bueno, aquí entre nos, en el transcurso del tiempo he aprendido que es mejor callar sobre los proyectos que tengo para “Mayte Carpio”, ya cuando se concreten yo me sentiré muy feliz de poder compartirlos con ustedes. Lo que si puedo contarles es que sigo componiendo, trabajando en los aspectos técnicos musicales de mi voz, aprendiendo. Y también con las presentaciones musicales en eventos culturales y privados, en los cuales interpreto música puneña, para los cuales aprovecho la oportunidad para invitarles visitar mi página de Facebook Mayte Carpio Cantautora, y también mis demás redes sociales como Mayte Carpio

Finalmente, ¿qué aconsejarías a los que empiezan en este mundo mágico del canto?

Pues primero les diría que no es un camino tan fácil como muchas personas creen. Es como todo en la vida, hay que ponerle mucho esfuerzo y disciplina. Y si quieres hacerlo realmente y lo haces con amor, hazlo. La vida es solo una, y solo necesitamos seguir la voz de nuestra alma, no deberíamos quedarnos solo con las ganas. Pero siempre con humildad, porque todos estamos en proceso de aprendizaje y crecimiento.