¿Dónde está Cerrón?
Por: Carlos Meneses
La Policía no puede cumplir con las obligaciones que le impone la ley porque no dispone del número suficiente de efectivos que no se resuelve con solo el apoyo de la Fuerza Armada y el Congreso demora en aprobar medidas complementarias necesarias para el estado de emergencia.
Se han cumplido ya 30 días desde que Vladimir Cerrón, fundador y máximo dirigente de Perú Libre, pasó a la condición de prófugo desde que la justicia ordenó para él una prisión preventiva de más de 36 meses.
El Ministerio del Interior puso precio a información sobre su destino y anunció una gratificación de 100 mil soles a quien permitiera ubicarlo y detenerlo, nadie dice nada sobre el tema y no se sabe si realmente está escondido en el interior del país o ha fugado al extranjero, pero lo cierto y negativo es que el ciudadano en mención se hace presente a través de transmisiones en la red social X (antes Twitter) y en gestiones judiciales sobre sus asuntos.
La verdad es que la diligencia policial sobre el caso no tiene las características que se reconocieron cuando 4 coroneles de la Policía Nacional del Perú, entre los cuales estaba Harvey Colchado, que fueron destinados a colaborar con los esfuerzos de esclarecimiento y allanamientos de domicilios en apoyo del Ministerio Público y que han sido ratificados en el encargo solicitado por las fiscalías o no están participando en el empeño o están ahora muy atareados en la lucha contra la delincuencia repotenciada en todo el país .
Ocurre que, evidentemente, el número de efectivos y el apoyo logístico con que cuenta la Policía, a pesar de colaboración ordenada de la Fuerza Armada para combatir el delito y el estado de emergencia vigente, han resultado insuficientes como para que oficiales distinguidos en la lucha contra las mafias organizadas no puedan encontrar ahora a gente como el señor Cerrón o traer a Hinostroza del extranjero.
Entretanto en el país la violencia persiste y todavía se espera un cambio en el afán de devolver la paz y la tranquilidad a todos los peruanos.