Por: Carlos Meneses

“Los estudios mal hechos obligan con frecuencia a adendas que encarecen la obra pública y evidencian un mal trabajo de quienes hicieron la tarea de proponerla”.

La Municipalidad Provincial de Arequipa retirará de dos avenidas principales de la ciudad como son: Jorge Chávez y Goyeneche y camino a Tingo las ciclovías que allí se pusieron sin estudios previos y con consecuencias malas, pues han sido destruidos en su mayoría los marcadores de zona, además de las constantes protestas de los transportistas que las usan.

En realidad, no son malas las ciclovías como lo evidencia la realidad de países europeos que las tienen en gran número o como las que ahora luce México, pero cuando las cosas no se hacen con participación de entendidos en la materia los resultados saltan a la vista.

También se cuentan las pérdidas económicas que sufre el Municipio cuando tiene que reponer lo dañado o retirarlo porque no sirvió para buen fin. Ante estas realidades es de advertir la necesidad de que existan penas significativas para las autoridades municipales o regionales que hagan estudios incompletos o insuficientes para las obras que tengan previstas.

Un país pobre no puede darse el lujo de invertir dinero en lo que no va a servir para nada. Urge que se determinen no solo responsabilidades, sino obligaciones de reembolsar de parte de quienes hicieron los estudios que no sirvieron para buen fin.

Es la única manera de evitar, también, las llamadas adendas que no significan otra cosa que incremento de costos para poder satisfacer las necesidades no cubiertas por los estudiosos a quienes se les encargó su elaboración y que o se equivocaron o deliberadamente hicieron las cosas para que salieran sin que pudieran ser suficientes.

Eso es válido para adendas tan importantes como la 13 de Majes que ha permitido por años el retraso de los trabajos de 38 mil hectáreas por irrigarse o como en el caso que nos ocupa, que las ciclovías sean desprestigiadas por errores de estudios al escoger las calles o avenidas que se habilitaron solo para bicicletas o paralelas a pistas que a la postre resulten también insuficientes por su reducción de ancho.