La nueva causa
— Redacción Diario El Pueblo —
Por: Carlos Meneses
“La hora del reencuentro entre peruanos está dada y los arequipeños queremos ser de los primeros en pregonar que así debe ser”.
Todo indica que en Perú se están dando las condiciones necesarias y adecuadas para mejor entendernos para así procurar que las equivocaciones sean enmendadas en los casos que lo aconseje la inteligencia y la búsqueda de afectos entre peruanos.
La no vacancia del presidente Castillo no debe significar otra cosa que una manera de reabrir puertas cerradas y de dialogar.
También la de intentar que regiones como Arequipa no sean excluidas de la tarea de participar en el gobierno pues, así como Lima no es el Perú, tampoco se le puede sustituir a la macro cefálica capital de la República por un lugar distinto, pero igualmente centralista como lo es ahora.
Aquí existen un millón de habitantes y todos ellos tienen una capacidad emprendedora a la que hay que dar oportunidad no solo de opinar, sino de hacer. Si se quiere ver hasta dónde somos capaces de dar no hay, sino que mirar al pasado reciente o antiguo donde se evidencien bondades. Marginando, por supuesto, a los equivocados que daño nos han hecho con sus errores.
El diálogo es el único lenguaje que nos diferencia de seres inferiores. Si podemos conversar, es que podemos entendernos y si de talento se trata revisemos la historia de las mujeres y de los hombres que en Arequipa nacieron o vinieron para aprender a ser buenos ciudadanos, mejores creyentes en sus propias capacidades.
Tenemos instituciones históricas que lucharon por libertades, justicia y verdad. Esos valores no se perderán nunca mucho menos cuando hay un sol que nos alumbra, tenemos un cielo despejado para ver también en él a lo que es cierto, sin confundirlo con la mentira y mucho menos con el engaño.