Por: Carlos Meneses

“Majes tiene que tener la supervisión de universidades y colegios profesionales para garantizar la no repetición de los errores del ayer”.

No nos cansaremos de repetir la necesidad de contar con un consejo consultivo o un directorio con participación de la sociedad civil arequipeña para señalar cómo debe manejarse el virtual inicio de las obras de Majes II.

AUTODEMA y el Gobierno Regional de Arequipa insisten en un sistema que nunca funcionó. Lo que se pretende es que siga al frente AUTODEMA, la gran responsable del mal de Majes y, en consecuencia, resulta inconveniente que los mismos que motivaron la paralización del proyecto durante los últimos 10 años, sean ahora los salvadores de algo que está dañado en las entrañas.

La importancia de Majes es muy grande por la trascendencia que en empleo y en ingresos significará no solamente para la región Arequipa sino para la macro región sur, pues alrededor de 200 mil empleos directos o indirectos dependen de lo bien que se hagan las cosas. Ya sabemos cómo se han manejado antes de ahora y también cuánto hay por esclarecer de responsabilidades en AUTODEMA, así como en los gobiernos regionales de Yamila Osorio y de Elmer Cáceres Llica.

No cuesta nada crear un organismo supervisor que vigile la correcta inversión de los fondos, la ejecución de las obras que siendo necesarias no fueron ejecutadas en su momento y con el dinero existente en la primera etapa del proyecto.

Con Majes no puede repetirse, otra vez, lo que ha ocurrido hasta ahora y así como reconocemos la importancia de la intervención del gobierno central que ha llegado al extremo de “poner pistola en pecho” a la gobernadora para exigirle firmar la adenda 13.

Del mismo modo, no dudamos en señalar la necesidad de que en Majes tenga presencia la sociedad civil a través de universidades y colegios profesionales así como el caminar de la Contraloría General de la República para poner las cosas a derecho.