Falleció Isabel II, la monarca británica que reinó por 7 décadas
— Redacción Diario El Pueblo —

La reina Isabel II murió en su residencia de Balmoral a los 96 años, después de un reinado de 70 años.

Su familia acudió a su residencia de Escocia después de que los médicos expresaran preocupación por su estado de salud este jueves.

Tras llegar al trono en 1952, la reina Isabel protagonizó el reinado más extenso de la historia británica, marcado por su fuerte sentido del deber y su determinación por dedicar su vida al trono y a su pueblo. La reina murió en paz en Balmoral esta tarde», anunció ayer el Palacio de Buckingham.

El rey (Carlos) y la reina consorte (Camila) permanecen en Balmoral y volverán a Londres hoy.

Tras llegar al trono en 1952, la reina Isabel protagonizó el reinado más extenso de la historia británica, marcado por su fuerte sentido del deber y su determinación por dedicar su vida al trono y a su pueblo.

La Familia Real emitió un comunicado en nombre del nuevo rey, que será llamado oficialmente Carlos III:

«El fallecimiento de mi querida madre, Su Majestad la Reina, es un momento de máxima tristeza para mí y para todos los miembros de mi familia».

«Lloramos profundamente el fallecimiento de una soberana y una madre muy querida».

«Sé que su pérdida se sentirá profundamente en todo el país, los reinos y la Commonwealth y por innumerables personas de todo el mundo».

«Durante este período de luto y cambio, mi familia y yo nos sentiremos reconfortados y sostenidos por el respeto y el profundo afecto que se le profesaba a la Reina».

SU VIDA

El reinado de Isabel II abarcó la austeridad de la posguerra, la transición del imperio a la Commonwealth, el fin de la Guerra Fría y la entrada y salida de Reino Unido de la Unión Europea.

Durante ese tiempo conoció a 15 primeros ministros, comenzando por Winston Churchill, nacido en 1874, e incluyendo a Liz Truss, nacida 101 años después, en 1975, y nombrada por la reina a principios de esta semana.

La reina nació como Elizabeth Alexandra Mary Windsor en el barrio londinense de Mayfair el 21 de abril de 1926.

Elizabeth Alexandra Mary Windsor fue la primera hija de los duques de York.

Pocos podían haber previsto que se convertiría en reina, pero en diciembre de 1936 su tío, Eduardo VIII, abdicó para casarse con la estadounidense Wallis Simpson, quien era divorciada.

Su padre se convirtió en Jorge VI y, con diez años, Lilibet, como la llamaban en familia, pasó a ser la heredera al trono.

Tres años después, Reino Unido estaba en guerra con la Alemania nazi. Isabel y su hermana menor, la princesa Margarita, pasaron gran parte de la guerra en el castillo de Windsor, después de que sus padres rechazaran ser evacuados a Canadá.

Al cumplir 18 años se enroló en el Servicio Territorial Auxiliar, donde aprendió a conducir y reparar camiones.

Durante la guerra, se intercambió cartas con su primo tercero, el príncipe Felipe de Grecia, quien estaba en la Marina real británica. Su romance inició unos años después y la pareja contrajo matrimonio el 20 de noviembre de 1947 en la Abadía de Westminster. El príncipe recibió el título de duque de Edimburgo.

La reina Isabel y el duque de Edimburgo estuvieron casados durante 74 años.

«Ha sido, simplemente, mi fortaleza y se ha quedado todos estos años. Yo, su familia y este y muchos otros países le debemos mucho más de lo que él admitiría y de lo que nunca sabremos», dijo la reina en 1997 refiriéndose a su marido. Estuvieron casados durante 74 años, hasta la muerte del duque en 2021, a los 99 años.

Su primer hijo, Carlos, nació en 1948, y dos años después llegó la princesa Ana. Andrés y Eduardo nacieron en 1960 y 1964, respectivamente. Entre todos le dieron ocho nietros y 12 bisnietos.

LA CORONACIÓN

La princesa Isabel estaba en Kenia, como parte de una gira oficial en 1952, cuando le llegó la noticia de la muerte del rey y regresó inmediatamente a Londres, ya como la nueva reina.

La reina Isabel fue coronada en la Abadía de Westminster el 2 de junio de 1953, a los 27 años, en una ceremonia televisada que vieron millones de personas.

Las siguientes décadas fueron de gran cambio, con el final del Imperio británico y los agitados años 60 para la sociedad británica.

Isabel introdujo cambios en la monarquía para esta era, interactuando con el público a través de viajes, visitas reales y asistencia a eventos públicos. Su compromiso con la Commonwealth fue una constante: visitó todos los países de la Commonwealth al menos una vez.

Pero hubo períodos de dolor privado y público. En 1992, el «annus horribilis» de la reina, un incendio devastó el castillo de Windsor y tres de los matrimonios de sus hijos se rompieron.

Después de la muerte de Diana, princesa de Gales, en un accidente automovilístico en París en 1997, la reina fue criticada por mostrarse reacia a responder públicamente.

Hubo preguntas sobre la relevancia de la monarquía en la sociedad moderna.

Una multitud se reunió cerca del palacio de Buckingham antes de que anunciaran la muerte de Isabel II.

Carlos, como príncipe de Gales, pronunció en el mes de mayo por primera vez el Discurso de Reina en nombre de su madre.

«Ninguna institución (…) debe esperar estar libre del escrutinio de quienes le dan su lealtad y apoyo, y mucho menos de quienes no lo hacen», reconoció.

Ya como una joven princesa de 21 años, Isabel prometió dedicar su vida al servicio al país.

Al recordar aquello décadas después, durante el Jubileo de Plata en 1977, dijo: «Aunque aquella promesa la hice cuando era muy joven, no me arrepiento ni me retracto de ninguna palabra».

Ese mismo compromiso lo hizo 45 años después en una carta de agradecimiento a la nación durante el fin de semana del Jubileo de Platino este junio.

La efeméride se celebró con una serie de ceremonias de Estado y festivales que reflejaron la cultura británica, así como fiestas callejeras.

Aunque ya por motivos de salud la reina se mantuvo alejada de algunos eventos, dijo: «Mi corazón está con todos ustedes».

En un momento celebrado con júbilo por la población, tres generaciones de su familia se unieron a ella en el balcón del palacio de Buckingham para el último desfile de las celebraciones.

La esposa de William, Catherine, se quedó en Windsor con sus tres hijos – Jorge, Carlota y Luis, que el jueves tuvieron su primer día de escuela.

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, afirmó que la reina fue una de sus «personas favoritas en el mundo».

Carlos III, el nuevo rey de Inglaterra

Carlos III, de 73 años, liderará un país en duelo como nuevo rey y como jefe de Estado de 14 territorios de la Commonwealth. Camila, su esposa, se convierte en reina consorte.

Los cuatro hijos de la reina acudieron al castillo de Balmoral, donde la reina pasaba sus vacaciones de verano, después de que los médicos expresaran preocupación por su estado de salud el jueves. Sus nietos, los príncipes William y Harry, también acudieron a Balmoral.

La primera ministra británica, Liz Truss, que fue nombrada por Isabel II este mismo martes, destacó que la reina «nos dio la estabilidad y la fortaleza que necesitábamos».

«Ofrecemos nuestra lealtad y devoción» al nuevo rey, dijo Truss.

«Y con el final de la era de Isabel II, entramos en una nueva era de la magnífica historia de nuestro país, exactamente como su majestad hubiera deseado, pronunciando las palabras: ‘Dios salve al rey'».

En el palacio de Buckingham en Londres miles de personas se congregaron a la espera de novedades sobre el estado de salud de la reina y muchos comenzaron a llorar al conocer la noticia de su fallecimiento.

Desde las 18:30 horas la bandera británica del palacio ondea a media asta y también se colocó en la verja de afuera el anuncio impreso de la muerte.

Dejanos un comentario

Your email address will not be published. Required fields are marked with *.