Por: Carlos Meneses

“Lo que ocurre con el transporte urbano debe ser tratado por la administración municipal actual con el conocimiento del Concejo de la nueva administración”.

Para el 2 de noviembre se anuncia una definición en materia del valor que el pasaje urbano de transportes tendrá en Arequipa. Los empresarios agrupados en el SIT han precisado que requieren de una tarifa que sea de alrededor soles 1.50 para poder seguir sosteniendo sus empresas, brindando el servicio público con flota renovada, garantizando seguridad y comodidad a sus usuarios.

Habían manifestado su incomodidad por la desatención del gobierno a la consideración que bien merece su situación. En tal sentido han conversado con la Municipalidad para buscar soluciones. No las encontraron y la consecuencia está a la vista. El número de unidades en servicio urbano ha disminuido en beneficio de los informales y también reforzando los viajes interprovinciales, descuidando los urbanos.

Mientras la gestión actual de la Municipalidad quiere diferir hasta enero del año entrante atender el reclamo de los transportistas, que no están dispuestos a permitirlo, se ha fijado el 2 de noviembre como fecha para iniciar una medida de presión en la que los transportistas paralizarán actividad.

El Municipio está en una encrucijada difícil de resolver y en la que debiera participar, de todas maneras, quienes han ganado las elecciones para renovar el cuerpo edilicio.

Comprendemos que el SIT que no tiene un sistema operativo válido merece el análisis que se demanda. Asimismo, estimamos que de tales conversaciones y negociaciones debe participar el alcalde electo para contribuir a buscar soluciones inmediatas a un problema que cada día empeora y ahora se agrava con la amenaza de escasez de combustible.