Por: Roxana Ortiz A.

La ilusión de regalar un juguete, puede también convertirse posteriormente en una pesadilla si es que no se escoge uno de buena calidad y sobre todo que esté fabricado con productos que no generen daño a la salud de los niños.

Muchas veces se cree erróneamente que el juguete más barato se encuentra entre los vendedores ambulantes o en las ferias que aparecen por estas fechas, sin haber hecho antes una comparación de precios con los que se venden en establecimientos formales, que podría significar el pasar una feliz Navidad o por el contrario, terminar en el hospital, según lo señalaron los especialistas de la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental.

Hay muchos de estos juguetes, algunos muy de moda y de colores llamativos que entre sus componentes contienen metales pesados como el plomo, bromo, cadmio, selenio y otros que de ser absorbidos por los pequeños podrían traer consecuencias fatales para su salud, al sufrir una intoxicación. Por ejemplo el plomo, es un metal que es utilizado para dar ese color brillante a la pintura, que de ser consumido en altas dosis podría hasta causar cáncer.

Para evitar llevar estos objetos al hogar, Gina Fuentes Salas, responsable de Vigilancia de Sustancias Químicas, recomendó a los padres de familia tienen que fijarse en el rotulado que tiene el empaque o producto donde indique el nombre del juguete, la razón social, el RUC, la dirección del importador, procedencia, el Registro Sanitario y Registro Nacional expedido por DIGESA.

Dijo que hay comerciantes muy astutos que se hacen imprimir una buena cantidad de etiquetas para colocarlos a diversos juguetes, por lo que deben estar atentos a que la etiqueta le corresponda al juguete; si se trata de una pelota tiene que decir pelota, no muñeca, por ejemplo.

“Los juguetes tóxicos pueden contener metales pesados como cadmio, cromo, plomo, entre otros. El plomo, comúnmente ligado al cadmio, es el metal más pernicioso encontrado en investigaciones hechas a nivel internacional por la Organización Mundial de la Salud”, indicó la especialista.

Igualmente recomienda evitar comprar aquellos que emanen olores intensos, revisar si se sale la pintura con facilidad, lo cual es una señal de alerta, ya que el objeto lúdico puede contener sustancias tóxicas y el menor puede llevárselo a la boca, siendo expuesto a una intoxicación.

El coordinador de Enfermedades no Transmisibles de la GERESA, Dember Muñoz Lozada, informó que la presencia de metales pesados puede ocasionar efectos severos a la salud de los más pequeños, como: trastornos en el comportamiento y aprendizaje, reducción del crecimiento físico, lesiones del oído, lesiones en el cerebro, alergia a la piel, dolores de estómago, de cabeza, mareos, vómitos, daños renales, hepáticos, a nivel cerebral y anemia.

Destacó que la principal forma de exposición es por vía oral, después de la vía cutánea e inhalación. Son factores determinantes, el tiempo de exposición a la sustancia tóxica, estado nutricional y edad, ya que siendo más pequeños, más funestas serían las consecuencias.

Desde hoy se estarán haciendo operativos en todo tipo de establecimientos en la ciudad para verificar la calidad de los juguetes y si es que cumplen con los requisitos básicos para su comercialización, por lo que los comerciantes deben estar alerta y evitar el comercio, ya que las multas son bastante altas, además de una denuncia penal por atentar contra la salud de las personas.