Ataque al Perú
Por: Luis Gonzáles Posada – El Montonero
En medio de la tragedia provocada por las lluvias y huaycos, que afectan especialmente a los más pobres, los gobernantes del socialismo del siglo XXI, lejos de solidarizarse y brindar ayuda humanitaria a nuestro país, aprovechan los difíciles momentos que padecemos para redoblar su campaña de ataques a la democracia peruana y sus instituciones, en sórdida venganza por la destitución de Pedro Castillo, miembro de su panaca política.
Hay nuevos hechos que así lo demuestran. Primero, que el mandatario de Chile, Gabriel Boric, anuncie que en paralelo a la cumbre Iberoamericana que se realizará en Santo Domingo, el próximo 24 de este mes, ha convocado una reunión de «presidentes amigos de América Latina: Andrés López Obrador, de México; Alberto Fernández, de Argentina; Xiomara Castro, de Honduras; Gustavo Petro, de Colombia; y Luis Arce, de Bolivia, para abordar el tema de la migración irregular en la región».
Resulta torpe –y desleal– que el gobernante chileno excluya al Perú de esa cita, conociendo que albergamos 1.3 millones de venezolanos, muchos de ellos migrantes indocumentados que han huido de la dictadura chavista, una masiva migración considerada sensible por diversos organismos humanitarios y por la propia Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Sin embargo, Boric, demostrando irresponsabilidad y estar lejos de ser considerado un estadista –menos un latinoamericano que trabaja por la unidad e integración continental– ha querido marginar a sus vecinos peruanos, con quienes comparte frontera y organismos multilaterales de la importancia de la Alianza del Pacifico y el Foro de Integración Asia-Pacifico (APEC), así como reuniones anuales de los Gabinetes Binacionales que permiten confraternizar e impulsar proyectos conjuntos en beneficio de los pueblos.
Por su parte, el mandatario colombiano Gustavo Petro no tiene el menor reparo en continuar con su actos injerencistas, violando el artículo 19 de la Carta Fundacional de la OEA, que establece como principio que los integrantes del sistema hemisférico “no tienen derecho de intervenir, directa ni indirectamente, y sea cual fuere el motivo, en los asuntos internos o externos de cualquier otro”. Después de agraviar a nuestra Policía Nacional, comparándola con tropas nazis, y sostener la falacia de que Castillo se encuentra preso sin orden judicial ni defensa, ahora anuncia que se ha reunido con Guido Croxatto, abogado de Castillo. Croxatto con Zaffaroni, ambos argentinos, son parte de la corriente garantista de derechos básicos para una democracia”.
Luego, el ex guerrillero del M-19, afirma que “la democracia está en peligro”, y que para comprobarlo “solo tenemos que mirar hacia el sur, donde un presidente está preso y hacia el norte, donde existen campos de concentración”, en clara alusión al Perú y El Salvador.
Los hechos referidos demuestran que la ofensiva continuará, porque el propósito del socialismo del siglo XXI es demostrar incondicional fidelidad a quienes integran su grupo, no importa lo que hayan hecho. Y al mismo tiempo, que son implacables en denostar a quienes atentan contra uno de sus miembros, llámense Pedro Castillo o Cristina Kirchner.
En ese contexto, reiteramos que no debemos perder la batalla de las comunicaciones, como está ocurriendo. Para revertir este escenario desfavorable, que tiene el efecto colateral de provocar un cargamontón en la prensa extranjera, debe movilizarse al exterior un equipo de comunicadores para que la comunidad internacional conozca que Castillo no fue derrocado por un golpe del Congreso ni se encuentra encarcelado sin orden judicial y sin defensa, como se ha dicho. Es decir, simplemente para que se conozca la verdad.