Por: Carlos Meneses

Las investigaciones permitirán llegar al fondo de la verdad y quienes denuncian en medios de comunicación, deben proporcionar pruebas y actuar con la verdad, porque está de por medio la estabilidad y la democracia en el país.

La Primera Fiscalía Especializada en Delitos de Lavado de Activos incorporó el último martes a la presidenta Dina Boluarte, Henry Shimabukuro y Pedro Castillo, como investigados en la presunta comisión de los delitos de organización criminal y financiamiento prohibido.

En el caso de Castillo es por el presunto delito de lavado de activos; Shimabukuro es investigado por el caso ‘Gabinete en la sombra’; mientras que para Dina Boluarte se dispuso ampliar nuevos hechos vinculados al delito de lavado de activos por la campaña electoral del 2021.

Asimismo, el presidente de la Comisión de Fiscalización sostuvo que es probable que citen a Boluarte por los presuntos financiamientos a su campaña.

Ante este difícil escenario político, la mandataria pidió nuevamente evitar «la confrontación estéril» y las maniobras políticas con intereses oscuros que solo buscan desestabilizar la institucionalidad y la democracia y; aseguró que quienes buscan desestabilizar su gestión son los que «dieron un golpe de Estado»; de esta manera culpó directamente al gobierno de Castillo.

Por el bien del país, para no afectar el escenario político e inestable del país la presidenta debe acudir al Congreso y dar las precisiones que sean necesarias sobre presunta financiación ilegal en las elecciones generales del 2021.

Es decir, Boluarte tiene la responsabilidad de asumir su defensa y dejar en claro al país que ha sucedido en este caso. Especialmente ante este escenario de inestabilidad, debe actuar con transparencia y de manera firme.

Lo peor que puede pasar es rehuir, por el contrario, se impone la necesidad de reafirmar el principio de autoridad, la transparencia en la política nacional, que tanto necesita el Perú.

La investigación del Ministerio Público continuará y deberá acudir las veces que sea citada a declarar, porque el que nada debe, nada teme. Es lo que toda persona demócrata y respetuosa de la autonomía de las instituciones debe hacer en situaciones somo la referida.