Ausencia de liderazgo en Perú
Por: Carlos Meneses
El Congreso de la República, los partidos políticos y el Poder Judicial cuentan desde hace años con una desaprobación que oscila entre el 80 y 90 por ciento.
El país necesita nuevos líderes que promuevan el cambio e impulsen la lucha contra la corrupción en la sociedad y eso se concretará con ciudadanos honestos y comprometidos con el Perú.
La ausencia de liderazgo resulta preocupante, lo cual ha provocado la actual crisis social y política en el Perú. Asimismo, el Legislativo como el Ejecutivo han tenido malos aprendizajes en torno a reglas democráticas que permitan la gobernabilidad.
Afrontamos uno de los peores momentos políticos, porque, a partir del 7 de diciembre, en el fallido golpe de estado, tanto el Ejecutivo como el Congreso no han logrado cambios, pese a que han pasado más de 4 meses.
La falta de liderazgo tanto del Ejecutivo como del Legislativo, viene generando incertidumbre, desconfianza y parálisis en nuestra economía. La conflictividad política no permite a nuestras autoridades ver con claridad el panorama económico en el que estamos. Hemos llegado a una situación insostenible, el futuro del Perú está en juego, urge corregir el rumbo.
Por el contrario, los aprendizajes no han sido para mejoras sino para empeorar la situación. Somos un país donde la rotación de parlamentarios es la más alta de América Latina y, sin reformas, la sociedad tendrá los mismos resultados en cuanto a estabilidad democrática
La gente rechaza a los políticos y a la política y así se tiene a una ciudadanía que no controla socialmente al Congreso, el cual siente autonomía, porque, al rechazarlo, la gente dice no quiero saber nada de política. Es como si los parlamentarios hicieran lo posible para que se mantenga esta situación.