Por Carlos Meneses

Esta modificación de la ley es una acción populista que busca solucionar los problemas de la delincuencia por las ramas y no la raíz.

La inseguridad es el flagelo que afecta diariamente a la ciudadanía. El uso de armas no letales por parte de los serenos es solo una arista de una solución integral que se debe ejecutar de forma articulada.

El uso de armas no letales para serenos ha generado controversia entre alcaldes y especialistas en seguridad. La aprobación por insistencia de la ley resalta que es un primer paso para garantizar la integridad de los serenos; sin embargo, los opositores advierten que el uso de “armas no letales” expone a los serenos ante delincuentes armados.

El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, sostuvo  «yo no voy a poner gas pimienta a un sereno para combatir a un tipo que le va a disparar en la cabeza; para nosotros la solución es el patrullaje integrado».

También resaltó la necesidad de reforzar la implementación del área de Seguridad Ciudadana de los gobiernos locales con motos, GPS, cámaras, entre otros recursos para hacer frente a la creciente inseguridad, problema que afecta directamente a la población. El equipamiento, según los recursos de cada municipalidad, serán grilletes de seguridad, bastón tonfa, aerosoles de gas pimienta y chalecos antibalas.

Especialistas en seguridad, aseguran que se desconoce la esencia del cuerpo de Serenazgo: la prevención y el acercamiento a la población civil, generando con su presencia en el espacio público la disuasión, sin necesidad de ejercer violencia.

Agregan que ante la ineficiencia de la Policía Nacional ganar réditos políticos a través de un discurso de mano dura y militarización de la vida civil, creando un frente cada vez más armado, pero vulnerable ante la falta de preparación y medios que cubran la salud y la integridad de los serenos que deberán enfrentarse a delincuentes que cuentan con armas de fuego. No obstante, esta terea es y debería de ser únicamente responsabilidad de la Policía y sus escuadrones de Inteligencia.